Además de los servicios mencionados anteriormente para la asistencia a los viajeros, también tienen acceso a una zona habilitada para Cruz Roja donde realizan labores sanitarias de apoyo a la enfermera que hay en el SAS. Llevan a cabo una gran actividad social donde por ejemplo 'juventudes de la cruz roja' lideran un servicio gratuito de guardería.

Una prestación que cuenta con la participación de una veintena de voluntarios que se dividen en horarios de tres personas y dos turnos direntes, el primero es de 10.00 de la mañana a 14.00 de la tarde; el segundo turno corresponde de 16.00 de la tarde a 20.00 de la noche. Los padres deben registrar con nombres, apellido y edad al niño que se quede en la guardería, para poder llevar así un registro exhaustivo. La estancia está climatizada, disponen de agua y numerosos juguetes para hacer más amenas las horas de espera de los niños. Los menores de 4 años siempre deben estar acompañados por alguno de los padres. Cruz Roja también ofrecen ayuda social a las familias como por ejemplo el acompañamiento a farmacias, ayudarlas con posibles problemas en el transporte, los ayudan a embarcar y a desembarcar, etc. Hay un mínimo de 2 personas prestando servicio y un máximo de 4, todo depende de la afluencia de personas que haya ese día. Tienen tres previsiones, la verde es cuando hay menos gente y trabajan dos, amarillo es cuando hay movimiento ese día y actúan tres personas y la alerta roja es cuando hay mucho tránsito de viajeros y están cuatro personas prestando servicio. De 8.00 a 10.00 de la mañana son los únicos que ofrecen un servicio sanitario hasta que llega el SAS. Aseguran que este año ha sido bastante tranquilo en cuanto a incidencias, que lo más habitual han sido cefaleas, mareos, brechas, vómitos o brechas por golpes en los viajes. Son un servicio esencial que no sólo se preocupan por el estado físico de las personas, si no que también se involucran por su bienestar personal.