Las playas del Levante almeriense siguen siendo tristes protagonistas de varamientos de animales marinos sin vida en sus playas, esta vez por la aparición de una tortuga boba (Caretta caretta) en Carboneras.

El pasado sábado, Protección Civil del municipio carbonero daba el aviso del varamiento a la asociación Equinac, encargada de atender estos casos en la costa almeriense. En unos minutos se desplazaron hasta el lugar miembros de la red de varamientos de Equinac para registrarlo y pudieron comprobar que se trataba de un ejemplar muerto de tortuga boba de unos 70 centímetros de caparazón, el cual presentaba una gran protuberancia.

El animal no llevaba marca ni microchip, por lo que nunca había sido marcada por ningún equipo de investigación ni por algún otro centro de recuperación de cualquier lugar.

Tras la toma de datos, el equipo veterinario de Equinac realizó la necropsia a los restos del animal y comprobaron que había una gran cantidad de plásticos en el interior de su aparato digestivo. Por ello han querido hacer un llamamiento para concienciar de la importancia que tiene evitar que se arrojen este tipo de materiales al mar, ya que muchos animales los ingieren provocándoles la muerte.

La tortuga boba está catalogada como "vulnerable" en el Catálogo Español de Especies Amenazadas, ya que quedan muy pocos ejemplares.