El consejero de Fomento, Felipe López, y la alcaldesa de Mojácar, Rosa María Cano, firmaron ayer en el salón de plenos, y en presencia también del consejero almeriense Rodrigo Sánchez, un convenio de colaboración fundamental para la construcción de la segunda fase de la variante costera mojaquera. Para el desarrollo de la actuación, la Junta ha aportado los terrenos ya expropiados así como los trámites de expropiación complementarias en caso de ser necesarias. También se encargará de la dirección de la ejecución de las obras. La Consejería de Fomento licitó en 2010 el proyecto de la variante, dividiendo la actuación en dos fases, una primera ya ejecutada, con 3,3 kilómetros con una inversión de 4,3 millones y una segunda que comprendía 5,7 kilómetros (y 9,5 millones de coste), si bien fue descartada por afectar en su trazado a la tortuga mora.

Con la firma de este convenio, el Ayuntamiento de Mojácar retoma esta segunda fase, aunque en el tramo comprendido entre la glorieta de la financiación de la carretera A-1203 hasta el Paraje Las Marinas. Un trazado resultante de 2,2 kilómetros y un coste aproximado de 4,5 millones de euros, según el anteproyecto redactado por la Diputación. Una vez finalicen los trabajos, será el Gobierno andaluz el responsable de conservar y mantener la carretera. La alcaldesa de Mojácar resaltó la importancia de la variante costera para el sector turístico debido a las largos embotellamientos que se producen, principalmente en verano, en la vía de acceso a los diferentes núcleos urbanos de la zona de playa. Por su parte, el consejero de Fomento puso en valor la cooperación técnica entre ambas administraciones que posibilita la construcción de esta variante que supone un soporte vital turístico y que contribuirá a la mejora de la calidad de vida de Mojácar.

El consejero de Fomento y Vivienda, Felipe López, asistió también ayer al inicio de las obras para la mejora de la seguridad vial en la A-332, concretamente en torno al kilómetro 11, donde actualmente existen problemas de acceso a los polígonos industriales que allí se ubican, así como al 'Camino de Lorca', que se eliminarán tras una inversión de un millón de euros y un plazo de ejecución de ocho meses. Esta carretera discurre desde Cuevas hasta San Juan de Los Terreros, con una longitud de 33,67 kilómetros y una intensidad media de 5.000 vehículos diarios. Según ha explicado el consejero, en "esta zona se está produciendo un importante desarrollo industrial en las parcelas anexas, por lo que hemos considerado necesario actuar para facilitar las incorporaciones y dar más fluidez al tráfico con una solución estructural a doble nivel que permitirá mejorar la seguridad vial". Los trabajos, que estarán finalizados el próximo verano, según ha adelantado el consejero, se desarrollarán en el tramo comprendido entre los puntos kilométricos 9,1 y 13 y consistirán en la construcción de dos glorietas unidas por un puente. Con estas obras se reordenarán los accesos existentes a esta zona industrial, se conseguirá reducir la velocidad y se evitarán los giros indebidos a la izquierda que actualmente se registran. "Con todo ello damos respuesta a una actuación muy demandada por los usuarios de la zona, ya que se resolverán de forma ágil los movimientos de vehículos turismo y de tráfico pesado, cuyo crecimiento ha sido paralelo al notable incremento de las empresas exportadoras hortícolas localizadas en la zona", argumentó el consejero de Fomento.

En Almería, conservación y mejora de la seguridad vial supone este año una inversión de unos 11,5 millones, entre las labores de reparación y mantenimiento de las carreteras -a través de los centros de conservación- y las obras proyectadas para garantizar a los usuarios una circulación en óptimas condiciones, cuya inversión prevista ronda los cuatro millones de euros. En Andalucía crecen un 30% las partidas presupuestarias de 2017 para obras en carreteras.