Arnés, cuerdas, poleas...el Grupo de Rescate de Protección Civil sacaba ayer todo su equipo de montaña para poner a prueba la eficacia del servicio. En esta ocasión se trató de una persona que se precipitó por la ladera de un monte quedando atrapada en un lugar de difícil acceso.

Contra viento y marea, los miembros del grupo tuvieron que realizar una dura tarea que se vio complicada por las condiciones meteorológicas. El coordinador de esta unidad perteneciente a Protección Civil, José María Hernández, detalló que el objetivo del simulacro es "analizar todos y cada uno de los pasos que realizamos, los tiempos o el material entre otras muchas cosas. Posteriormente esto se estudia para una mayor efectividad en posteriores salidas". En apenas tres meses el grupo de rescate ha realizado más de cinco servicios.

Entre ellos el de un cazador de 46 años, que se había precipitado por un barranco entre el Alto de la Polacra y Cala Carnaje en Rodalquilar, en Níjar. Ese mismo día se procedió asimismo al rescate de un escalador del Barranco de Cacín en Fondón, que sufrió una caída, lo que le produjo una rotura de ligamentos.

La Unidad de Emergencias es un servicio que presta la Diputación de Almería, a través de Protección Civil, a la provincia, en colaboración con las unidades de emergencia ya formadas por las diferentes administraciones públicas. Entre sus líneas de actuación se recoge la implantación de un dispositivo de respuesta rápida y eficaz, coordinada y eficiente a todo tipo de urgencias o emergencias.

"Nuestras principales tareas son las intervención en rescates, búsqueda de personas desaparecidas, accidentes con gran número de víctimas, en situaciones de emergencia, catástrofe y calamidad pública", informó el coordinador del grupo. Todas las intervenciones que lleven a cabo se realizarán bajo el control operativo del Centro Coordinador del Sistema Emergencias 112 Andalucía.