Cientos de vecinos de la zona de Torrequebrada, en Aguadulce, se han visto obligados a pagar cantidades que oscilan entre los "1.300 a más de dos mil euros largos, pero muy largos" por los recibos de varios años de Impuesto de Bienes Inmuebles IBI que se les han facturado en una sola vez y además con recargo por el tiempo transcurrido. Su indignación les ha llevado a presentar reclamaciones en el ayuntamiento durante el pasado mes de agosto, que siguen presentando.

Según explican los afectados de la comunidad del Residencial Torrequebrada "no sabemos si el problema ha sido del ayuntamiento o del catastro, pero el hecho es que nos han llegado recibos correspondientes a tres, cuatro o cinco años de IBI. Nos hemos visto afectadas unas 430 viviendas y casi un centenar de triplex, con casas y plazas de garaje. Hemos abonado ya estas cantidades pero estamos indignados por las formas con que la administración se ha cebado con nosotros teniendo en cuenta que pagamos como máxima categoría. Tenemos impuestos de primera y servicios de cuarta categoría. El ayuntamiento sólo nos quiere para pagar impuestos, porque faltan contenedores de basura, no hay servicio de autobús y tenemos muchas deficiencias", afirman indignados.

En concreto una de las personas que ha tenido que hacer frente a estos gastos aseguraba que "pago más IBI aquí en Aguadulce que en Madrid". Otra vecina denunciaba que "cada año en la declaración de la Renta figuraba como que la vivienda no constaba en ningún sitio. Llamábamos al ayuntamiento y nos decían que la documentación estaba por hacer y siempre nos decían que el año siguiente estaría resuelto. Hacienda me mandaba todos los años una carta reteniéndome mi aportación de retribución porque tenía que demostrar que tenía una vivienda y que estaba pendiente del número de referencia catastral. Tuve que pagar tres o cuatro recibos del IBI en julio y la semana pasada he visto que me ha llegado el último. Pagué más de 800 euros la primera vez y ahora casi 300 euros, por un apartamento normal y corriente. Cuando compramos la casa nadie nos dijo nada, sino que año tras año he tenido que ir preguntando la situación en el catastro, en Hacienda y en el ayuntamiento, y de repente me pasan cuatro o cinco recibos de una vez", se lamentaba Paqui López.