El Puerto de Almería va a cambiar. Y con él la ciudad. Simplemente, porque el objetivo es llevar a cabo una integración. Quien visitado Málaga en las últimas fechas se habrá dado cuenta de que su fachada hacia el mar ha cambiado. Ha creado vida en un espacio muerto. Pues el mismo equipo que se encargó de El Palmeral de las Sorpresas malagueño será el encargado de redactar el proyecto de transformación de la capital. Han sido los ganadores del concurso que la Fundación Bahía Almeriport ha gestionado y al que se han presentado 14 empresas. La UTE Junquera-MC Valnera (con un presupuesto de 109.500 euros) tiene ahora trabajo por delante, y según las condiciones, deberá haber terminado la redacción del proyecto en un plazo de ocho meses.

El llamado Master Plan garantizará, de la misma forma, un cronograma de actuación. Con ello, se intentará, junto con las reuniones de la comisión de seguimiento entre adjudicataria, Ayuntamiento de Almería y Autoridad Portuaria, que el proyecto no caiga en saco roto. Su ámbito de actuación es amplio, desde el último espigón hasta la playa de Las Olas de Pescadería.

Aunque la principal responsable del futuro diseño del Puerto será la UTE adjudicataria, esta parte con una premisas básicas registradas en el pliego técnico. La UTE deberá prestar especial atención a la consecución de paseos peatonales, donde ello sea posible, y a ampliar el puerto deportivo en aras de convertirlo en un auténtico "polo de atracción". El proyecto deberá facilitar accesibilidad peatonal en el ámbito de actuación, aunque también se tendrá en cuenta la accesibilidad de vehículos al área Puerto-Ciudad. En esta línea, el documento realizará una dotación suficiente de plazas de aparcamiento acorde al plan de usos propuesto.

Además, el puerto deportivo sea "de acceso libre para todos los ciudadanos" y, al mismo tiempo, "compatible con el uso concesional del mismo". Para ello, las necesarias obras de abrigo se deben diseñar "de manera que sean accesibles y sirvan de paseo peatonal con inmejorables vistas al mar" entendiendo que constituyen, "en definitiva, la apertura al mar que demanda la ciudad".

En cuanto a los usos y la edificabilidad, el master plan debe definir los parámetros urbanísticos fundamentales máximos como ocupación, edificabilidad, usos y alturas, entre otros, para cada uno de los usos previstos "sirviendo como punto de partida para la elaboración de los futuros planes especiales que hayan de redactarse."

"Estoy totalmente convencido de que el Puerto-Ciudad va a seguir avanzando", explica Ramón Fernández-Pacheco, alcalde de la capital. "Iniciamos un camino que será un revulsivo para el diseño de la ciudad en su conjunto. Estamos empeñados en que se haga con celeridad y prontitud.", sostiene Mari Carmen Ortiz, presidente de la Autoridad Portuaria.