Hace dos años comenzó la "tortura" para Margarita Céspedes, a quien ningún especialista ha encontrado solución ni a puesto nombre a la enfermedad que padece. Desde entones espera para ser operada. "Todo fue a raíz de un accidente laboral -cuenta la paciente- por el que tenían que operarme de las manos y poner una prótesis en la rodilla izquierda".

La afectada trabajaba en contacto directo con niños, por lo que la salud de sus articulaciones era imprescindible para desempeñar su tarea laboral. A esto "aun no le han puesto remedio". Margarita ha permanecido 18 meses de baja laboral a la espera de una intervención quirúrgica.

"No me han operado todavía y lo peor es que a raíz de esto voy a peor. Si sigo así al final me moriré". Lo primero fue una angina de pecho, seguida de una trombosis. A esto le han sucedido unos episodios por los que la paciente sufre inflamaciones en diversas partes del cuerpo como los ojos o las manos."Esto último me viene sucediendo desde hace tres meses y parece que se trata de un problema autoinmune por el que he acudido a urgencias al menos 22 veces.

Lo único que me suministran es cortisona y no la asimilo puesto que soy diabética". Margarita asegura que nunca la ha visto ningún especialista. Ha realizado numerosas peticiones en el Hospital Torrecárdenas que nunca han tenido respuesta. Asimismo, ha solicitado encuentros con el delegado de Salud de la Junta, Manuel Lucas, que "no me ha recibido". Exige "una respuesta inmediata" e insiste en que lo único que quiere es "una solución a mi enfermedad". Recientemente, señaló que le dieron el alta médica sin pasar por ningún tribunal.