Dos modelos diferentes para desarrollar políticas, socialista y popular, y un debate común: Europa. La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, estuvo anoche en El Ejido acompañando a la candidata al Parlamento Europeo, Mari Carmen Ortiz, en su primera visita a la provincia en esta precampaña. También contaron con la presencia del secretario general del PSOE de Almería, José Luis Sánchez Teruel, y el secretario general de la Agrupación ejidense, Tomás Elorrieta. Junto a ellos, protagonistas ayer, estuvo buena parte de la familia socialista de la provincia.

La presidenta llegó con un mensaje muy contundente a tierras ejidenses: "el Partido Socialista es la alternativa y nos estamos jugando mucho". De esta forma se metió en el bolsillo al militante socialista que abarrotaba el salón de conferencias de Ejido Hotel anoche.

Fueron muchos los temas que fueron abordados por la presidenta, donde puso de manifiesto la intensidad con la que están afrontando los socialistas esta precampaña europea, y es que su futuro pasa en buena medida por el reto del 25 de mayo.

Díaz desglosó sus mayores preocupaciones, comenzó tratando el desempleo juvenil, la sanidad o la educación. Continuo con un tema que más sensibilidades despertó durante la velada fue la Dependencia, aseverando que "en Andalucía no vamos a dejar a nuestros dependientes en el camino, por eso seguimos y seguiremos aguantando a pulmón, pues nadie tiene derecho a decirnos que este derecho de los ciudadanos no es sostenible".

Especial mención hizo a la importancia que tiene la agricultura almeriense como motor económico andaluz y español, motivo por el que "elegimos a Mari Carmen Ortiz, quien mejor que una mujer con su trayectoria como candidata buena conocedora de este sector", explicó la presidenta quien además reconoció que "el Partido Socialista quiere la voz de los almerienses en Europa".

En cuanto la corrupción política, y con la investigación de la presunta malversación de dinero público en cursos de formación de la Junta, la presidenta pidió paciencia y quiso dejar claro que "lo vamos a combatir nosotros mismos. Llevamos siete meses haciendo comprobaciones, pero pedimos el mismo respeto para Andalucía, precisamente el mismo que le dan a la comunidad de Madrid", y subrayó que "no nos temblará el pulso contra aquel que se aproveche de lo público en nombre de los socialistas".

Se despidió apuntando que Europa "no está viendo el sufrimiento de 27 millones de desempleados, de que nadie persigue el fraude, etc. Por eso hay que volver a la izquierda, mirar al sur y a los ojos de las personas".