La Justicia argentina autorizó ayer la extradición del ex concejal de Marbella Carlos Fernández, fugado desde 2006, cuando la Policía lo buscaba por su implicación en el caso Saqueo dos, una de las ramificaciones del caso Malaya, en el que está acusado de un supuesto delito de malversación de caudales públicos.

Varios juzgados españoles habían solicitado la extradición de Fernández desde su detención -el pasado 15 de septiembre en Argentina- por seis procedimientos penales que investigan supuestos delitos de cohecho, apropiación indebida, malversación, prevaricación y contra la ordenación del territorio, entre otros. Sin embargo, el tribunal sólo la aprobó para uno de los casos porque considera que el resto están prescritos en base a la legislación argentina.

El magistrado argentino también estableció que el ex edil marbellí podrá quedar en libertad si abona 300.000 pesos (alrededor de 14.000 euros), aunque "con restricciones", entre ellas, la obligación de presentarse cada 15 días en el juzgado y de pedir autorización para salir de la provincia, así como la prohibición de abandonar el país. Fernández no pudo abonar la cantidad requerida ayer debido a una huelga que tiene lugar en los bancos del país, pero está previsto que lo haga mañana y sea excarcelado.

Fernández, sobre quien pesaba una circular roja de Interpol solicitada por la Justicia española por los delitos de cohecho y corrupción, se había sometido a varias intervenciones quirúrgicas para cambiar su fisonomía y pasar inadvertido en el país austral.