Dos victorias consecutivas y, sobre todo, la buena imagen que ha dado el equipo en dichos triunfos (UCAM Murcia y Villanovense) sobre el terreno de juego, ha cambiado el ambiente en el seno de la plantilla del CD El Ejido y en el de sus aficionados, que cabe recordar que hace menos de un mes dedicaron pitos y abucheos varios tanto a Pierre Mevy como al técnico Alberto González. Por suerte, y después de mucho esfuerzo y quebraderos de cabeza, sobre todo para el preparador malagueño, el conjunto del Poniente parece haber dado con la tecla justa para caminar por la senda positiva y alejarse de esos puestos de descenso que hace unas pocas semanas rozaban peligrosamente con los dedos de sus pies.

Los celestes navegan ahora con seis puntos de ventaja sobre las posiciones de descenso directo, pero todavía deben confirmar de forma matemática la permanencia en la categoría de bronce, por segundo año consecutivo, para poder acabar el curso sin presión y, si tuviesen la suerte de cara, quizás optando a algo más que a la simple salvación. Pero la prioridad es salvarse primero, como bien recuerda siempre González, y para ello los ejidenses buscarán esta tarde-noche en Santo Domingo encadenar ante el Mérida una tercera victoria seguida que les dejaría su objetivo prioritario muy cerca. Además, sería la primera vez en la presente temporada que los almerienses logran esa cifra de triunfos seguidos.

Para esta cita ante un rival directo en la batalla por permanecer, el malagueño apostará por mantener su 4-4-2, que tantas alegrías le ha dado últimamente, aunque introducirá algunos cambios en varias posiciones. Velasco se perderá el choque por acumulación de tarjetas, pero González recupera a Lolo González y podrá contar, después de dos meses, con Álvaro Ocaña, novedad en la convocatoria junto con Germán, reciente fichaje celeste.