Este fin de semana arranca el play off de ascenso a Segunda División, un duro camino que tendrán que recorrer dos jugadores almerienses que buscan ser de plata la próxima temporada y, si la Unión Deportiva Almería hace bien sus deberes, podrían volver a jugar en el Estadio Mediterráneo, donde ambos defendieron la elástica rojiblanca antes de probar suerte lejos de casa. Se trata del delantero Dani Romera y del central Manuel Jesús Casas, más conocido como Molo, que actualmente militan en el FC Barcelona y en La Hoya Lorca, respectivamente. El ariete cañaero comienza la ida de la eliminatoria de campeones hoy en el Mini Estadi ante la Cultural Leonesa (19:00) y el zaguero mañana en casa del Albacete (19:30).

"Ha sido una temporada muy buena, desde los primeros partido y durante todo el campeonato. Afrontamos esta promoción con muchísima ilusión, ya que somos muy jóvenes todos y tenemos muchas ganas de subir a Segunda. Es difícil no notar nervios, pero cuando entras al terreno de juego se van y te centras en darlo todo en el campo. Tenemos que trabajar al máximo y hacer un buen resultado en este primer partido para ir a León con cierta tranquilidad", comentaba ayer a este diario el jugador criado en la cantera de La Cañada y que militó desde 2011 a 2015 en la UD Almería, desde categoría juvenil hasta senior, destacando sus buenos registros con el filial y su debut con el primer equipo el 30 de noviembre de 2013 en Balaidos ante el Celta en Primera División. Actualmente, a las órdenes de Gerard López, el ariete de 21 años de edad se ha convertido en uno de los más realizadores del curso en el segundo equipo azulgrana, rozando la veintena de tantos. Espera que su puntería no falle en este tramo decisivo y pueda cumplir su meta de subir un peldaño más, en el que podría encontrarse con el equipo de su tierra.

De como encarar un play off sabe mucho Molo, ex de Oriente, Comarca del Níjar, UD Almería, Villarreal B, Osasuna B, Guijuelo y Lleida. Lo intentó con el cuadro catalán en tres ocasiones y ahora, con el Lorca, espera que a la cuarta sea la vencida. Con 31 años de edad, el almeriense destaca por su experiencia y su pundonor, es un jugador curtido en mil batallas y cuyas lesiones, algunas graves, como la que le privó de debutar en Primera con el Osasuna, no le han quitado nunca sus ganas de seguir disfrutando del fútbol. Asegura que "después de cuatro play off espero que este sea el definitivo para culminarlo con un ascenso. Llegamos en un buen momento pese a todos los obstáculos que se nos han ido poniendo en la segunda vuelta, con muchas lesiones por el camino". El central, que ha marcado esta campaña un gol, precisamente ante el CD El Ejido en la última jornada, espera volver a jugar en el Mediterráneo, "porque sería una muy buena señal. Nosotros estaríamos en Segunda y el Almería se habría salvado, que es lo que deseo". El defensor ya sabe lo que es la categoría de plata, ya que tuvo sus minutos con la UD Almería en la etapa del técnico Paco Flores.