El número uno mundial, el español Rafael Nadal, se clasificó por la vía rápida para los cuartos de final del Barcelona Open Banc Sabadell-Conde de Godó, al derrotar con facilidad a su compatriota Guillermo García-Lopez, por 6-1 y 6-3.

Más intenso, agresivo y con más ritmo que en su debut ante Roberto Carballés, el diez veces campeón del Godó sólo estuvo una hora y diecinueve minutos de la pista que lleva su nombre. Ganó el primer juego con su servicio, García-López hizo lo propio con el suyo y, a partir de ahí, Nadal encadenó nueve juegos seguidos para ponerse 6-1, 4-0 y saque.

Con el partido prácticamente perdido, García-López dejó de sentirse intimidado por el balear y empezó a soltar el brazo. Ofreciendo su mejor repertorio, encadenó tres juegos seguidos, uno de ellos, con el saque de Nadal, que le rompió en blanco.

Pero el 'rey de la tierra' no dio opción a que pensase que la remontada era posible. Volvió a aumentar el ritmo y selló el partido ganando los dos últimos juegos. Rafa Nadal se enfrentará este viernes en la penúltima ronda contra eslovaco Martin Klizan, verdugo del serbio Novak Djokovic en segunda ronda y del español Feliciano López en octavos de final.

El tenista eslavo no descarta dar la sorpresa ante Nadal. "Parece estar en una gran forma, pero también es humano. Nadie es imbatible", comentó tras el partido Klizan, que ayer ya dio la sorpresa al derrotar al exnúmero uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, en segunda ronda. El de Bratislava tiene derecho a pensar en grande. No en vano logró alcanzar las semifinales en Barcelona en 2015, aunque ahora esté el 140 del mundo y haya entrado en el cuadro grande procedente de la fase previa.

A Klizan, uno de los tenistas más prometedores del circuito en su etapa júnior (ganó Roland Garros júnior en 2006), una lesión en la pantorrilla lastró su rendimiento en 2017.