Victoria de las que dan moral. El Ciudad de Vícar comenzó perdiendo, fue capaz de remontar, se quedó con uno menos y sufrió en el tiempo de prolongación.

Los de Pepe Koscis sumaron tres puntos que les permiten seguir en la zona media alta de la tabla. Sin embargo, para el derbi de la jornada del jueves el conjunto vicario no tendrá disponibles ni a Fran, que fue expulsado, ni a Alex Tejada por acumulación. Además, Sevilla se tuvo que retirar tocado y tendrá que estar entre algodones.

El Málaga B salió más enchufado que los almerienses para intentar dejar sentenciada su permanencia. Los boquerones, que llevan toda la temporada cortándose con el filo de la navaja, basaron su empuje en la calidad de los jóvenes Carlos Rodríguez y Javi Ramos. Ambos jugadores, con clara vocación ofensiva, tienen por delante un gran porvenir y ayer lo demostraron en Vícar.

Cuando la primera mitad estaba a punto de finalizar, saque de esquina que bota Silva, la defensa albiverde no es capaz de despejar y Carlos Rodríguez, con la batuta preparada, bate a placer a David Cortés.

Parecía que era un gol psicológico y que les podía pasar factura a los vicarios. Pero Pepe Koscis arengó a los suyos en el vestuario y salieron a por todas en la reanudación.

La maquinaria local se puso las pilas y, en dos minutos, el partido iba a dar un cambio radical. Primero fue Canillas el que recogió un balón cerca del área y colocó el esférico en la escuadra de la meta de Fran. El empate expoleó a los almerienses, que iban a poner el 2-1 definitivo minutos después.

En esta ocasión, Sorroche recibe en la media punta, se prepara el balón y golpea cruzado. La estirada de Fran no evitó que el hábil jugador vicario se reencontrase con el gol.

A partir de ahí, el Ciudad fortaleció su línea defensiva, pero sufrió al final. Con uno menos, los locales tiraron de la experiencia para aguantar el resultado.