No hubo manera. El Poli Ejido B le puso entrega, garra, muchas ganas, pero le faltó lo más importante: el gol. Tercera jornada en la que el filial no ve puerta y, al final, un punto que mantiene las distancias con el Granada Atlético, cuarto clasificado.

Los granadinos, con un equipo veterano y con mucha calidad en el centro del campo, se acomodaron en su parcela y evitaron la creación por parte del equipo celeste. La rapidez por las bandas era la baza fundamental del Atlético.

El Poli Ejido B quiso llevar la iniciativa desde el prinicipio. Los pupilos de Miguel Novo cerraban sus líneas y no dejaban huecos. Pedro Galera y Jesús León le hicieron la vida imposible a un Ryan batallador que se fajó con toda la defensa granadina.

Las dos ocasiones más claras estuvieron en las botas de Francis y Juanfra, el mejor jugador del partido, pero el meta Baca les ganó la acción. El cancerbero visitante hizo dos buenas intervenciones que evitaron los tantos celestes.

Conforme pasaban los minutos, la desesperación comenzaba a surgir entre los jóvenes jugadores de Lucas Cazorla. El técnico ejidense introdujo cambios, pero no pudieron deshacer la maraña que había tejido el conjunto de Novo. El Atlético se iba a conformar con un punto que peleó con uñas y dientes. Al final, el 0-0 resultó inamovible y el Poli se tuvo que conformar con el empate.