La reforma de la Política Agraria Comunitaria supone un "varapalo brutal" para los agricultores andaluces que dejarán de percibir 1.264 millones entre 2008-2012 por el recorte de las ayudas directas, y además es un "golpe mortal para la agricultura, el medio ambiente y el mundo rural europeo".

En un comunicado, Asaja-Sevilla ha asegurado que la reforma, aprobada hoy por los ministros de Agricultura de la UE, "refuerza el desmantelamiento de la PAC", y ha lamentado que cuente con la "complicidad" de la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural, Elena Espinosa, y del consejero de Agricultura, Martín Soler, que "no han sabido defender el peso de la agricultura española" .

Ha alertado de que "la que más perderá será la Junta" andaluza, que posee 6.000 hectáreas y va a ser objeto de la modulación, una medida por la que las explotaciones que reciben más de 300.000 euros en ayudas "serán castigadas" con una reducción adicional del 4%.

Según la organización agraria, el acuerdo es "nefasto, disparatado e incoherente", puesto que fomenta el abandono, provoca el hundimiento de las producciones y deja la satisfacción de las necesidades alimentarias y energéticas de los europeos en manos de terceros países.

Ha incidido en que la Comisión Europea, con la "complicidad" de los ministros de Agricultura de los 27 Estados miembros, ha propinado un "golpe mortal a la agricultura, el medio ambiente y el mundo rural al aprobar un acuerdo para desmantelar la PAC y reducir en más de un 20% el apoyo que recibe el sector agrario europeo".

En opinión del presidente de Asaja-Andalucía, Ricardo Serra, este acuerdo es "incoherente" porque mientras se habla de potenciar el medio rural se aprueba una reducción presupuestaria y medidas que fomentan el abandono y favorecen el éxodo rural.

Además, ha aducido que mientras todos los organismos internacionales alertan de la urgencia por incrementar las producciones para satisfacer las necesidades alimentarias de una población mundial creciente, la Comisión Europea reduce el apoyo a los agricultores provocando el hundimiento de las producciones.

A esto se añade que mientras todos los países, especialmente EEUU, buscan diversificar sus fuentes de energía y superar la dependencia del petróleo, la UE debilita la PAC, la única política seria de apoyo a la actividad agraria y a la producción de biocombustibles, ha apostillado Asaja.

Para esta organización, el panorama que se vislumbra para 2013, fecha en la que se abordará una nueva reforma de la PAC, es "desalentador", puesto que van a ser muy pocos los agricultores con los que cuente Europa para esa fecha, con el "consiguiente perjuicio para la soberanía alimentaria, el medio ambiente, la biodiversidad y la ocupación de las áreas rurales".