La ministra de Agricultura y Pesca, Medio Ambiente y Alimentación, Isabel García Tejerina, hizo ayer un llamamiento al consenso para aprobar un pacto nacional por el agua, que sea "una auténtica política de Estado, integrada, solidaria y al margen de rivalidades políticas".

García Tejerina, que intervino ayer en Pamplona en un foro organizado por Navarra Televisión, afirmó que el pacto nacional "no es sencillo en un país donde el déficit hídrico es una constante y existe una gran diversidad territorial", pero subayó por otro lado que "la gestión del agua es de vital importancia para toda la población española y especialmente para la agricultura".

En la búsqueda del consenso en política del agua, el Ministerio inicio en junio una ronda de contactos con todas las comunidades autónomas y desde septiembre ha hecho lo propio con regantes y usuarios, para empezar a continuación negociaciones con los grupos políticos.

La ministra plantea que este pacto debería centrarse en cuatro aspectos: la atención de los déficit hídricos haciendo hincapié en las infraestructuras necesarias; el cumplimiento de objetivos medioambientales; planes frente a inundaciones y medidas en materia de gobernanza del agua para garantizar el cumplimiento de los compromisos asumidos con la Unión Europea.

Mientras la ministra pide un pacto por el agua, las organizaciones agrarias siguen cuantificando daños por la sequía. Así, la organización agraria UPA-Jaén ha cifrado en un 25% las pérdidas en el olivar respecto a la campaña pasada por la sequía, de ahí que tachen la campaña de "complicada" y hayan pedido continuar con los regadíos hasta finales del mes de octubre para intentar paliar los efectos de la ausencia de precipitaciones. El secretario general de UPA Jaén, Cristóbal Cano, señaló que "si no fuese por el 40% de superficie de olivar que está en regadío, y que será el colchón que sostendrá esta campaña, estaríamos hablando de una situación catastrófica".