El 56,6 por ciento de los empresarios andaluces encuestados para la elaboración del IX Barómetro de Expectativas Empresariales consideran que la crisis económica será reversible en 2010, mientras que un 23,3 por ciento cree que terminará a finales de 2009.

La revista Andalucía Económica, encargada de la elaboración del barómetro junto a la Confederación de Empresarios de Andalucía, ha indicado en un comunicado que en el informe de esta edición, que se presentará hoy en Córdoba, los empresarios "han aportado las valoraciones más pesimistas" ya que "se han obtenido las peores previsiones desde que se realiza el barómetro".

Han señalado que la mayoría de los empresarios encuestados prevé reducir el año que viene su facturación (41,72 por ciento), también la rentabilidad (51,97 por ciento), el empleo (44,08 por ciento) y la inversión (45,70 por ciento), "datos que difieren mucho de ediciones anteriores".

En cuanto a las preocupaciones del empresariado, han indicado que en esta ocasión han sido el aumento de la morosidad y el desempleo, frente a las predominantes en pasados años, que eran la evolución al alza de los tipos de interés, la situación del sector de la construcción o la falta de inversión. Los empresarios han destacado que el turismo y el sector agrario tomarán el relevo "como sectores locomotora de la economía andaluza", y ninguno de los preguntados apuesta por la construcción y la promoción inmobiliaria.

En cuanto al factor que ha propiciado la situación económica actual, el barómetro refleja que la mayoría apunta a la crisis inmobiliaria y a la mayor rigidez en la concesión de créditos bancarios, y como solución apuntan a la bajada de los tipos de interés, políticas condescendientes en la concesión de créditos y alentar el consumo y la inversión.

Por último, entre los encuestados se ha apreciado una tendencia creciente en la aceptación de la posibilidad de construir centrales nucleares "para paliar la situación de dependencia energética que sufre el país".