Segunda jornada del Festival Flamenco de Almería que se celebra en Feria y que organiza la concejalía de Fiestas Mayores con tres estilos totalmente distintos sobre el escenario de la Plaza Vieja de Almería. En primer lugar actuó la joven artista de Huércal de Almería, Toñi Fernández acompañada a la guitarra por Diego del Morao. Esta gitana con una voz prodigiosa estuvo sensacional en los cuatro cantes que hizo durante su actuación. Comenzó por soleás para continuar por tangos, donde estuvo espléndida y entregada.

Luego saludó muy emocionada al público que no llegaba a las 2.000 personas. "Buenas noches, Estoy muy contenta de estar aquí, en mi tierra, con la misma ilusión y los mismos nervios que el primer día, en un Festival de la relevancia que tiene éste de Almería. Voy a poner todo mi corazón y toda mi ilusión para todos ustedes. Vamos a echar un ratito a gusto", comentó, mientras se arranca por seguidillas.

La última pieza interpretada por Toñi Fernández fue unas bulerías contando con el acompañamiento a las palmas de Jesús Fernández y Tito.

Tras la buena acogida a Toñi Fernández apareció en el escenario José Cortés Jiménez Pansequito acompañado a la guitarra por Manuel Parrilla. Este cantaor de solera y dominador de la mayoría de los palos del flamenco mostró su experiencia y sabiduría sobre el escenario. Pansequito, artista admirado en Almería donde tiene grandes amigos, dedicó su actuación a Almería, al público y a la Feria. "Me encanta Almería y siempre vengo dos días antes y me voy dos días después", dijo el cantaor.

En su repertorio tan extenso y variado hizo desde alegrías y soleás hasta fandangos y bulerías pasando por el taranto. Su actuación para los buenos amantes del flamenco fue de un gran nivel y demostró poderío sobre el escenario.

Pansequito como buen maestro del cante se atrevió a ponerse de pie y sin micrófono dejar constancia de su portentosa voz. Una actuación memorable en un Festival que cada año tiene muchos seguidores y que este año ha regresado de nuevo a la Plaza Vieja tras siete años de ausencia.

Entre el público había buenos seguidores de Pansequito como es el caso del Niño Josele que estaba junto a su padre Josele. El guitarrista almeriense lleva un año trabajando en su nuevo disco que para octubre está previsto que salga a la calle.

Y el cierre de una noche mágica lo puso José Mercé acompañado de Diego del Morao. Genio y figura. El cantaor jerezano mostró su madurez sobre el escenario e hizo un repertorio variado comenzando cantando por soleas para luego continuar por seguiriyas y malagueñas y germinando por bulerías acabando de pie y arrancándose a bailar. El público puesto en pie se mostraba encantado de escuchar al Mercé más flamenco.

Mercé que tiene a Almería como su segunda casa dejó bien claro desde el principio su cariño a la tierra. "Es un placer estar en mi casa, porque como sabéis en Andalucía se me conoce por la Peña El Taranto y sé que soy muy querido aquí en esta tierra". Subrayar la brillante actuación de Diego del Morao, que dejó huella a la guitarra de una de las grandes familias de artistas de toda Andalucía.

En una noche tan flamenca no faltaron entre el público la concejala de Fiestas Mayores, Lola de Haro; el concejal de Cultura, Ramón Fernández-Pacheco. También cantaores de prestigio como Juan Gómez y bailarinas de la talla de Cristina Samaniego. Fue una noche de flamenco de calidad, aunque este año está costando un poco que el público entré en calor o quizás es que los artistas en su regreso a la Plaza Vieja no tienen muy bien tomada la medida. El caso es que a excepción de Mercé, pocos cantaores hacen vibrar al público.