Unicaja ha cerrado las cuentas del primer trimestre del año en el que ha obtenido un beneficio neto de 100,6 millones de euros, lo que ha supuesto un 17,3% más que el resultado conseguido en el mismo periodo del año pasado.

La primera caja de ahorros de la provincia mantiene así su pujanza, a pesar de la delicada situación financiera y económica existente a escala nacional e internacional y del "debilitamiento experimentado por la demanda y por la producción en la economía", tal como asegura la propia entidad.

Desde Unicaja se considera que se han producido unos indicadores satisfactorios en la triple dimensión de rentabilidad, crecimiento y solvencia. Todo ello, gracias al aumento del margen de intermediación sin dividendos, que creció un 15,1%, así como del margen de intermediación, que se incrementó en un 12,8%.

Los gastos de explotación se mantuvieron relativamente contenidos, con una subida del 5,8%, lo que ha permitido que Unicaja obtenga una mejora del ratio de eficiencia y un incremento del margen de un 12,6%.

Las cifras de evolución del negocio reflejan una desaceleración en la demanda de inversión crediticia, especialmente en el sector inmobiliario, una tendencia prevista por la caja con un menor ritmo de crecimiento y de menores aumentos e, incluso, disminución del precio de los activos, así como de transición hacia una evolución de la economía más equilibrada sectorialmente y más sostenible.

No obstante, la inversión crediticia presentó una tasa interanual de crecimiento del 13,7%, alcanzando los 24.746 millones de euros. Los recursos administrados, por su parte, cerraron el trimestre con una cifra de 30.617 millones de euros, un 11,5% más que el año anterior. El aumento de los depósitos descansó en las imposiciones a plazo, con una subida del 28,1%. Los recursos fuera de balance registraron un crecimiento del 3,5%.

En estos tres primeros meses se ha producido un ligero repunte de la morosidad hasta el 0,75%, desde el 0,62% que se cerró el ejercicio 2007.