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Cuarteto Bretón, abriendo caminos

  • Entre las nuevas agrupaciones camerísticas españolas, el Cuarteto Bretón se distingue por su intenso trabajo sobre el repertorio español, que está llevando con frecuencia al mundo del disco.

En la importante revalorización y recuperación del repertorio musical español que se ha vivido en las últimas décadas quedan aún terrenos poco explorados, campos que merecen cuando menos miradas desprejuiciadas y trabajos exhaustivos, tanto de exhumación como de difusión y grabación: uno de ellos es sin duda el de la música de cámara del siglo XIX y primera mitad del XX. Paradójicamente, la crisis se está convirtiendo en una inesperada aliada de este sector del repertorio. Al menos así lo piensa Anne-Marie North, primer violín del Cuarteto Bretón: "Hasta hace unos años había muchos ciclos de música de cámara a los que venían los más prestigiosos intérpretes internacionales, casi siempre con el gran repertorio. Pero esos ciclos eran muy costosos. Ahora, al haber menos dinero, hay también más oportunidades para que grupos nuevos, como el nuestro, puedan acceder a este tipo de ciclos. En España hay muchos grupos de calidad, también cuartetos. Es nuestro momento. Tenemos que adaptarnos a la situación, y aunque sea con condiciones que no eran las de hace unos años, ofrecer cosas nuevas que puedan despertar el interés de la gente. Es lo que intentamos".

En ese interés por lo nuevo el repertorio español se lleva la palma. El Cuarteto Bretón surgió hace ya diez años cuando tres miembros de la ORCAM, la Orquesta de la Comunidad de Madrid (junto a North, el viola Iván Martín y el violonchelista John Stokes), buscaron a un segundo violinista (Antonio Cárdenas, que trabajaba en la ONE) para un concierto propuesto por la Fundación Juan March. "Nos encantó tocar juntos. Así que decidimos seguir adelante", comenta North. "Veníamos de sitios muy distintos. John es canadiense. Yo, francesa, los otros dos son españoles, todos con amplia experiencia en música de cámara. Al principio trabajamos mucho la mezcla, teníamos que buscar una manera de tocar juntos y encontrar un sonido, crearnos un carácter propio. Esa es nuestra gran obsesión desde hace diez años, tratar de ser uno, y hay veces en que tengo la impresión de tocar un solo instrumento de dieciséis cuerdas. Es una sensación fantástica, como si estuviera tocando un instrumento cuadruplicado".

El sello Naxos acaba de publicar el último trabajo del Bretón, los dos cuartetos del bilbaíno Jesús Guridi (1886-1961), obras escritas en 1933 y 1949, una música muy poco conocida. Anne-Marie North se ha encargado incluso de la edición del Cuarteto nº2, "una obra por la que tengo pasión. Lo tocamos por primera vez en 2006 y nos pareció genial, de un idiomatismo magistral. Pienso que tendría que estar en el gran repertorio y, sin embargo, aunque había ya una grabación anterior, no se programa casi nunca. El Cuarteto nº1 también es muy interesante. Se trata de una música muy rica en texturas, pero también en sentimientos; son obras además muy rítmicas, muy alegres, con muchas referencias al folclore vasco". El grupo lleva al disco en estos días otro nuevo proyecto: los cuatro cuartetos del compositor salmantino de quien toman su nombre, Tomás Bretón (1850-1923). "Son obras más clásicas que las de Guridi, aunque el nº2, conocido como Dramático, ya tiene armonías mucho más complejas. Siempre es bueno saber lo que esconde el patrimonio nacional, conocer toda esta música que no se tocaba. Sería una pena no tener recuerdo de ella."

Hace unos meses, el Cuarteto Bretón protagonizó además un estreno de gran relevancia, el Cuarteto nº8 del madrileño Conrado del Campo (1878-1953), cuya integral de catorce obras para el género pretenden también llevar al disco. "Es el único compositor español con tantas obras para nuestra formación. Catorce cuartetos en pleno siglo XX son muchos, incluso si lo comparamos con los compositores más grandes del siglo. Solo por eso tiene ya interés". North cree que si la figura de Conrado del Campo no es hoy tan conocida como debiera es "por el contexto histórico. En su época no tuvo muchas posibilidades de difundir su música. Funcionaban entonces muchas sociedades filarmónicas que ofrecían música de cámara, pero centradas sobre todo en el gran repertorio clásico y romántico. La música de Del Campo está muy influida por los maestros alemanes y austriacos. Cuando tocamos el Cuarteto nº8, vimos mucho a Strauss y a Wagner. Son obras extensas, con fraseos muy largos y muy bellos, que emergen de una armonía densa, aunque tienen también momentos de frescura, detalles de un carácter más español".

La dedicación del Cuarteto Bretón al repertorio español no es casual: "En la ORCAM se ha tocado siempre mucha música española. Participamos a menudo en el ciclo de solistas de la orquesta, donde nos suelen pedir, entre otras cosas, música española o latinoamericana. Rápidamente nos dimos cuenta de que el repertorio tenía mucho interés a pesar de ser bastante desconocido. Seguimos haciendo repertorio más convencional, pero aquí hemos encontrado una motivación importante para nuestras aspiraciones como grupo". Unas aspiraciones que incluye también la música actual: "Alfredo Aracil nos ayudó mucho al principio. En uno de nuestros primeros conciertos tocamos su Cuarteto nº3 y luego surgió la posibilidad de grabar su integral [está en el sello Verso]. Tener un contacto con el compositor, saber exactamente qué es lo que quiere escuchar y tratar de acercarnos el máximo posible a ese ideal nos parece muy estimulante. A nivel técnico resulta un trabajo experimental en muchos sentidos, pues los compositores actuales suelen sondear los límites del instrumento en la búsqueda de nuevas sonoridades, pero también en la dificultad de la ejecución o en las combinaciones tímbricas".

Anne-Marie North y sus compañeros viven su dedicación camerística como una auténtica vocación: "El cuarteto es nuestra pasión. Pero exige una dedicación enorme: ensayamos mucho, porque cada vez tenemos más conciertos. Sin embargo, eso no nos importa: el tiempo libre es para el cuarteto, no solo en nuestro trabajo conjunto, sino individualmente con las partituras o John, que se dedica a ver muchísima música de cámara en busca del repertorio que más nos convenga. Por suerte, contamos también con la ayuda de Carlos Magán, nuestro agente, lo que nos permite concentrarnos exclusivamente en lo que de verdad nos mueve, que es la música".

Cuarteto Bretón Cuartetos nos.1 y 2. Naxos

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