En septiembre de 2007, Juan Goytisolo visitaba de nuevo La Chanca  para participar en la grabación del documental Releyendo La Chanca , dirigido por Nonio Parejo. El escritor fallecido ayer, explicó hace casi diez años su interés por la provincia de Almería. "De enero a junio de 1956 hice los seis meses de prácticas de la Milicia Universitaria en el Regimiento de Infantería Badajoz numero 26, y en mi compañía prácticamente los reclutas eran oriundos de Almería y de Murcia. El trato con ellos me impresiono por su atraso, la mayoría eran analfabetos y me di cuenta que existía una España que yo ignoraba completamente y decidí al terminar el Servicio militar que iría a Almería".

El escritor recordó que "fui por primera vez a Almería con mi compañera Monique Lange en septiembre de 1956, estuvimos por Garrucha, Huércal Overa, Cuevas del Almanzora y vimos una pobreza indescriptible. Luego decidí que yo volvería solo. Hice dos viajes por Níjar, leí todo lo que había que leer sobre esta zona de Almería. El resultado de estos dos viajes lo condense en un relato único". Su viaje a la Chanca  por primera vez fue algo inolvidable para el escritor. "Después de visitar la zona de Níjar, vine a Almería e hice la visita a La Chanca . Recuerdo que no me atreví a entrar, y fui vestido de una manera muy humilde para pasar muy inadvertido. Esta visita fue realmente impresionante, encontré que se volvía a reproducir el dilema, por un lado la fascinación estética, la admiración ante un paisaje que entonces se consideraba atrasado. En la España de aquel momento lo bello era lo no rico y había muy poca gente que tuviera sensibilidad a la belleza del sur". "Cuando fui a la Chanca  tenia bastante miedo, porque era una persona que me consideraban bastante hostil al régimen, entonces fui de una forma procurando pasar inadvertido. Además había el problema del recelo de la gente, porque la llegada de alguien era siempre vista como peligrosa. Hice un recorrido y no repetí la experiencia, pero fue lo suficiente para ver lo que eran las cuevas y como se vivía en el barrio", apuntó.

Las sensaciones de Goytisolo con La Chanca  fueron contradictorias. "Sentía una fascinación estética pero por otro lado tenia una indignación moral ante la situación en la que vivía la población en aquel momento". Goytisolo llegó ayer a reconocer que su relación con Almería ha sido a veces conflictiva. "Las relaciones humanas no son fáciles, cuando hay una cierta pasión o interés siempre hay conflicto".