Pablo Berger participó anoche en los Encuentros con Directores de Cine de Unicaja con la película Blancanieves que fue proyectada en el Teatro Cervantes. El cineasta bilbaíno apuntó que "para mi Almería es sinónimo de cine. Solo hay que pensar en la gran cantidad de películas que se han rodado en esta provincia. Hace pocos meses estuvo Daniel Monzón rodando El Niño; David Trueba rodó Vivir es fácil con los ojos cerrados y hasta Ridley Scott también pasó por Almería para rodar su película Exodus".

"Todos los cineastas españoles tenemos una visión romántica de Almería, y equivale a cine" dijo Berger que explicó que "Blancanieves ha sido una película muy afortunada porque ha llegado a muchos países. El país donde mayor éxito ha tenido después de España ha sido Francia, pero eso no ha sido una sorpresa. Donde si ha sido una gran sorpresa fue en Asia, tanto Japón como Corea son países donde Blancanieves ha funcionado estupendamente".

Berger fue muy atrevido al rodar una película en blanco y negro y muda. "Los actores profesionales estaban aterrados porque están acostumbrados a utilizar el diálogo para protegerse. En el caso de Blancanieves la palabra no tenía tanta importancia, yo no me obsesione si no decían la palabra adecuada, y ojo, teníamos un guión normal, aparecían diálogos, pero no tenían que repetirlos. Lo que les preocupaba era el tono. Queríamos hacer una película muda para el público de hoy y eso lo tuve claro desde el principio del rodaje. El resultado fue muy interesante", dijo Berger.