Ignacio nació en Madrid, pero fue la Movida la que lo convirtió en Nacho Cano, uno de los integrantes de la mítica banda Mecano. Esta entrevista recorre su presente y su pasado, que es también el de una época.

-En algunos medios de comunicación se ha etiquetado el musical Hoy no me puedo levantar como una ópera moderna. ¿Cree usted que su musical se ha convertido en el Jesucristo Superstar de nuestro tiempo?

-Bueno… Las cosas han cambiado, y yo por causas ajenas a mi voluntad, ya no estoy involucrado en la obra. Hoy no me puedo levantar, ha sido el mayor éxito musical de todos los tiempos, así que supongo que la huella que puede dejar en nuestro país, es equiparable a la que imprimió Jesucristo Superstar.

-Tengo entendido que está trabajando en un nuevo musical. ¿Podría adelantarnos cual será su leit-motiv?

-Estoy en ello, pero prefiero no adelantar nada, por si hubiera algún retraso. No quiero quitarme de mí mismo el factor sorpresa.

-Hace tiempo que no vemos salir al mercado uno de sus discos. ¿Para cuando su próximo proyecto en solitario?

-La vida sabe donde te tiene que llevar. Mi próxima obra, es mi próximo musical. En estos momentos estoy concentrado en esto, así que no sé cuando me podré embarcar en la producción de un nuevo disco en solitario. Pero insisto, mis discos siempre han sido muy visuales, y probablemente, es ahora cuando realmente estoy dando rienda suelta a todo lo que siempre quise decir.

-Hizo Música para una boda, la de los Príncipes de Asturias. ¿Recuerda que sintió cuando se pusieron en contacto con usted para hacerle este encargo?

-Se puso en contacto conmigo el alcalde de Madrid. Gallardón siempre ha sido un melómano y además, con buen gusto. El Príncipe Felipe, en más de una ocasión se ha declarado fan de Mecano, e incluso en su momento, vino a vernos alguna vez. Además mantengo una estrecha amistad con la Infanta Cristina, así que me hizo mucha ilusión que contasen conmigo para hacerlo.

-Teniendo en cuenta su afinidad con el budismo, ¿qué opina de lo que está sucediendo en el Tibet actualmente?

-Ya hice una canción para Mecano del Dalai Lama. Es una pena todo lo que está sucediendo. Y entiendo lo que ha pasado con la Antorcha Olímpica. Mi vida cambió cuando tuve la oportunidad de conocer al líder espiritual de los budistas. Recuerdo que cuando coincidimos con él en Chile, vió nuestro video y se emocionó, mientras apretaba la mano de Ana.

-¿Qué siente cuando ve a Penélope Cruz disfrutando de las mieles del éxito en Hollywood?, ¿Mantienen la amistad?

-Con Penélope siempre he guardado muy buena relación, como con el resto de mis ex novias. De hecho, hablamos a menudo. Ella siempre ha sido una mujer muy trabajadora y se merece estar donde está.

-Otra mujer inolvidable que se cruzó en su vida -por motivos bien distintos- fue la Madre Teresa de Calcuta. ¿Cómo tuvo lugar aquel encuentro?

-Recuerdo que me dijo: "Utiliza tu fama para dar a conocer todo esto"- refiriéndose a la pobreza de Calcuta-, y así lo hice. Me enseñó que Jesucristo, no está en la ampulosidad de una catedral, sino en el trasero de los niños más pobres del mundo.

-Ha dicho hasta la saciedad que la ruptura de Mecano fue algo inevitable. Pero, ¿no añora aquellos tiempos?

-Mecano, quizás haya sido lo más bonito de mi vida. Pero aquellos años fueron una montaña rusa, porque trajeron el éxito y eso hacía que lleváramos siempre una vida al límite. Ana sobre todo estaba fatigada. Es cierto, que a lo mejor nos deberíamos haber despedido de otro modo, pero nos dimos cuenta de que nos habíamos alejado demasiado.

-Escoja uno de todos los temas de su trayectoria y explíquenos porqué es su favorito.

-Hoy no me puedo levantar fue una canción que compuse a los 17 años y cambió mi vida, la de mi hermano y la de Ana. Aún recuerdo el primer día que fui a cobrar a SGAE y las chicas de la ventanilla, corroboraban una y otra vez mis datos. Ya era millonario. Lo primero que hice fue comprar un coche a mis padres.