La mexicana se encuentra en uno de los momentos más dulces de su vida, tras dar a luz a Valentina Paloma regresa con varios proyectos para la pequeña y gran pantalla, pero sin duda su vida sentimental es el punto de mira por dar un vuelco en apenas tres años.

Recientemente este periódico hacía referencia a la posible reconciliación de la actriz con el multimillonario francés, Francois Henry Pinault, del que se separó a los diez meses de tener en brazos a Valentina y con el que tenía planes de boda. Sin embargo la sensual actriz que contoneó caderas mientras portaba una pitón albina en Abierto hasta el amanecer, emitió un comunicado en julio de este mismo año anunciando la separación del magnate y presidente de la empresa de artículos de lujo Pinault Printemps Redoute, dueña de Gucci, Yves Saint Laurent, y de la FNAC, e incluso llegó a declarar que ante la remota posibilidad de unirse en matrimonio con Pinault, a lo mejor lo haría solamente para la fiesta, y punto.

De aquello hace un mes y tan solo hace una semana pudo verse a la actriz en Rennes, Francia, ciudad natal de Pinault para ver un partido de fútbol del equipo del que es también propietario el magnate, quien además tiene una de las más prestigiosas colecciones de pintura de arte contemporáneo con al menos 2.500 obras. Precisamente en una exposición de su colección privada celebrada en Venecia fue donde ambos se conocieron. Fue amor a primera vista. Tanto que al año Salma Hayek anunciaba su pronta maternidad y su paso por el altar.

Por ahora la actriz solo habla de Valentina, de un año de edad, a la que todavía sigue amamantando, "soy como una alcohólica. No me importa si lloro, no me importa si me pongo gorda, sólo quiero hacerlo durante una semana más, un mes más, y luego veo que le hace tanto bien a mi hija que no puedo parar. Es algo que tiene mucho poder. Hay gente que dice que pierdes peso mientras amamantas ¡Pero eso no es cierto!" , declara la actriz latina entregada en pecho y alma a su pequeña.