Curiosamente el libro sobre viajeros que acaba de editar el IEA es una auténtica joya, puesto que recoge muchas crónicas y referencias a Almería de viajeros extranjeros. Desde la primera de Jerónimo Münzer en el año 1494 hasta la ultima de José María Pemán en 1958 hay un total de 146 testimonios de viajeros que pasaron por Almería a lo largo de cinco siglos.

Quizás de los más conocidos fuera Gerald Brenan que hizo su visita en 1920 o Julio Caro Baroja en 1950. Carlos García-Romeral sostiene que "narrar y contar lo que se ha visto y transmitirlo a otros es lo que da sentido al viaje y da fe de su ejecución. Su estudio es fundamental para el conocimiento de la historia cultural y social del país que describe, pero, sobre todo, da a conocer la imagen que de uno mismo se tiene en el exterior".

García-Romeral dice que "la narración de viaje recoge una experiencia subjetiva, sustentada en opiniones personales generadas a través de la experiencia intelectual y vital. El viajero no solo informa sobre lugares, gentes y costumbres, sino que genera opinión, por ello es tan importante la recopilación y ordenación de textos, para conocer quién viajó, por qué lo hizo y que transmitió a sus coetáneos". Esta claro que la obra del IEA conseguirá dar sentido a esas preguntas.