DESDE que salió aquella mítica frase publicitaria "Renault 4, su belleza es su mecánica" y la marca francesa se cansó de vender aquellos horrorosos coches, creo que las campañas de las empresas de automóviles no sirven para crear nuevos clientes, sino para arrebatárselos a la competencia o mantener a sus fieles. Quizás los únicos "nuevos clientes" son quienes se incorporan por edad al club de los conductores.

El vehículo se ha convertido en una necesidad tal que, como los móviles, existen familias que tienen más unidades que miembros. España ya posee un parque automovilístico mayor que el de Francia, al situarse en 501 vehículos por cada mil habitantes. Pero es que la previsión camina hacia un país saturado, como están Italia o Alemania. Los publicistas centran sus lemas en frases sugerentes destinadas a incitar las sensaciones de los conductores ya experimentados: seguridad, ahorro, placer al volante, fácil mantenimiento, capacidad o poco contaminantes, idea que se ha puesto de moda. Pero el coche, también, es un barómetro de la realidad económica. Mire usted cuántos se han vendido y sabrá si el Ibex 35 sube, si el TAE (el "chulo" de las hipotecas, que le llaman) se dispara o si la economía, como dice ZP, "está desacelerada".Al parecer, la crisis se nota, y mucho, en la venta de vehículos en la provincia. Tras varios ejercicios de buenas ventas para los concesionarios, el primer trimestre de 2008 se cerró con un descenso en la matriculación de turismos, motos y vehículos industriales del 27% con respecto al año pasado.Los coches gustan, pero durante el trimestre pasado han sido 5.705 los vehículos matriculados en Almería, muy lejos de los 7.805 de enero, febrero y marzo de 2007. La crisis está cebándose, especialmente, con el sector. Pero ¡sorpresa! si miramos con detenimiento las estadísticas nacionales de ventas por marcas, resulta que de las 37 más comunes sólo 6 han matriculado más que el año pasado. Y qué curioso que entre éstas se encuentran BMW, Mercedes, Smart o Mini, marcas vinculadas a los más pudientes. Es decir; como siempre, la crisis se come al pez chico, aquél que busca un modelo de gama media o media-baja.Por cierto, como en esto de las estadísticas se pueden obtener los datos más extraños, la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto), ha elaborado una sobre el tiempo que permanece un coche nuevo en el expositor del concesionario antes de ser vendido. Si el año pasado el coche se vendía tras una media de 45 días en el escaparate, hoy tarda 80 días. ¿Servirán estos datos para que el delegado de Gobierno le ponga nota al responsable de Economía?.