COMO si vinieran de una noche de fiesta, se presenta el Getafe en nuestro Estadio de los Juegos Mediterráneos, con muchas bajas en forma de lesiones y tarjetas que nos pueden beneficiar si salimos mentalizados desde el principio a tener el balón y disponer de él para tener la amenaza constante de meter gol, con lo cual, aseguraremos llenar las gradas en futuros partidos.

El discutido Víctor, que suele acertar cuando se equivoca, dispone de jugadores frescos y eficientes como Soldado y Uche, poco utilizados hasta no hace mucho, cuyo mayor peligro es su dominio del área en los centros que le suministran tanto desde la banda como desde la defensa en juego directo.

El tapar la zona central cercana a nuestra área de los propios rechaces para evitar los tiros imparables de Casquero también es una labor apta para nuestros centrocampistas. La estrategia con Casquero a romper o la de los envíos de las faltas y saques de esquina al primer palo para prolongar a los centrales como el Cata Díaz y Celestini, debe ser tenida en cuenta para evitar males mayores.

La debilidad de este equipo también nos viene servida por las bajas comentadas, pero el exceso de confianza nos puede pasar factura si no controlamos el contraataque de un equipo que viene a defenderse de principio a fin.

En cuanto al planteamiento táctico, Víctor Muñoz nos presentará su clásico 1-4-4-2 con defensa atrasada, que tiene mucha falta de trabajo zonal, mientras que Hugo Sánchez volverá a presentar el 1-4-1-3-2 con dos delanteros, Negredo y Uche, preparados para marcar, hoy sí, por partida doble.