La portavoz del PP- A en el Parlamento, Carmen Crespo, preguntó ayer a la consejera de Salud, Marina Álvarez, por la situación en la que se encuentra el Hospital La Inmaculada en Huércal-Overa, y le ha pedido al gobierno de Susana Díaz "medidas específicas y plazos" ante el clamor de los 175.000 vecinos de las comarcas del Levante, Almanzora y Norte de la provincia.

Crespo ha señalado que en pocos días el PP de estas zonas almerienses ha conseguido más de 20.000 firmas para solicitar a la Junta más especialistas y más médicos en este centro hospitalario y en los centros de salud, como así lo piden también sindicatos, profesionales y pacientes ante las carencias sanitarias que sufren. Una recogida de firmas que continúa y que los ciudadanos están apoyando porque aunque la Consejera se ha comprometido a ampliar y mejorar la cartera de servicios del centro hospitalario, "no sabemos si se va a hacer realmente o se va a quedar en una mera intención como suele pasar con las medidas del Gobierno andaluz".

Por ello, el PP va a solicitar la comparecencia de la Consejera en la Comisión de Salud para que explique en que consiste el Plan que anunció, las medidas específicas que lo conforman y los plazos, así como quienes forma parte de la mesa técnica encargada del estudio de las medidas que se pondrán en marcha.

En su intervención en el pleno del Parlamento, la portavoz popular ha denunciado el maltrato sistemático de la Junta a los profesionales sanitarios, lo que ha provocado una "fuga incesante de batas blancas a otras comunidades". En el caso de Huércal-Overa, "La Inmaculada se ha convertido en el icono andaluz de fuga de batas blancas especialmente a Murcia", porque los profesionales sanitarios se siente "maltratados laboralmente", como así reconocen los sindicatos, médicos y enfermeros, e incluso ahora la propia Consejera de Salud.

Carmen Crespo ha explicado que según el Colegio de Médicos de Almería este hospital no es atractivo para los especialistas por las pésimas condiciones laborales, con contratos eventuales que se renuevan hasta mes a mes y sueldos muchos más bajos que los de comunidades cercanas, como Murcia, por lo que en cuanto tienen la oportunidad se van a otros lugares.