Una ruta de senderismo hasta la localidad de Bédar, organizada por el Centro Municipal de Información a la Mujer (CMIM), dependiente de la concejalía de Bienestar Social del Ayuntamiento de Níjar, ha sido la que se ha encargado de cerrar el calendario de actividades del programa "Caminando en Igualdad".

La concejala de Bienéstar Social, Victoria Calatrava, acompañó a los senderistas nijareños hasta Bédar, destino de esta ruta y agradeció a todos su participación en esta iniciativa. "Este programa comenzó en 2016 como algo puntual, pero debido a la demanda y alta participación se ha prolongado en el tiempo", recordó esta edil.

Este programa ha organizado salidas de octubre a abril en los últimos dos años

En los últimos dos años, este programa ha realizado rutas mensuales desde octubre hasta el mes de abril. "El principal objetivo siempre ha sido crear un espacio de ocio donde se fomentase la igualdad, y permitiese a las personas ampliar sus círculos sociales a través del deporte, conociendo nuestro entorno más próximo y el de la provincia" añadió esta misma corporativa.

Esta última salida contó con la participación de 80 participantes, quienes realizaron la ruta minera de Bédar, quienes se trasladaron hasta este municipio en un autobús, para reconocer la ruta minera de Bédar. Media docena de miembros de Protección Civil de Níjar, tres guías y personal del Centro Municipal de Información de la Mujer se encargaron de la controlar la seguridad de los senderistas participantes.

El cargadero de la mina "Tres Amigos" fue el punto de salida de esta ruta que discurrió a lo largo de 11 kilómetros de camino. sendero y una dificultad media. Los participantes tuvieron la oportunidad de conocer el pasado minero del lugar como el ferrocarril, las minas y cargaderos y otras instalaciones mineras.

En el siglo XIX, laa actividad minera de Bédar marcó una etapa de prosperidad, siendo la tercera cuenca de hierro en importancia de la provincia, detrás de Filabres. Estas explotaciones se remontan a la época árabe desde 1525, aunque su mayor apoyo comienza en 1888, estando ya en manos cristianas.

Tras varios paréntesis, coincidiendo con las Guerras Mundiales, se cierran en 1970 definitivamente, dejando un importante legado arqueológico industrial. La minería empieza por ser una estrategia política, en 1525, para implantar la fe cristiana en los territorios ocupados por los Musulmanes, en las proximidades de Serena. En 1846 se contaron hasta 115 minas en Bédar , la mayoría de hierro.