Formular estrategias de conservación del azufaifar o artal a la vez que permitan la generación de conocimiento para el desarrollo de actividades ecoturísticas en el interior del Parque Natural de Cabo de Gata Níjar, es el objetivo del proyecto CO-ADAPTA presentado este miércoles, 17 de enero, en la UAL. Se trata de un proyecto financiado por la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura y Pesca, y Alimentación y Medio Ambiente. El encargado de ponerlo en práctica es el centro de investigación dedicado a la generación de conocimiento científico para la resolución de problemas ambientales de la UAL, el Centro Andaluz para la Evaluación y Seguimiento del Cambio Global (CAESCG).

El proyecto persigue convertir la población de azufaifar "en un ecosistema emblemático de la provincia y hacerlo con la colaboración de la sociedad", tal y como ha señalado el profesor de la UAL, Francisco Javier Caballero, responsable de CO-ADAPTA. La principal novedad es que se trata de un proyecto de "investigación inspirada en el uso" porque los que busca "es asegurarnos que el destinatario del conocimiento que generamos realmente va a usar ese conocimiento". Además, incorpora a la sociedad en la investigación y abunda en los valores de conservación de un ecosistema desde la perspectiva de cuál es la utilidad que este ecosistema puede tener para la sociedad almeriense".

Otra de las novedades es la creación de una ruta de senderismo a través de los artales de la llanura litoral de Cabo de Gata, que sea explotable por los empresarios turísticos y que sirva para explicar los servicios ecosistémicos que las azufaifos nos brindan y los efectos del cambio climático sobre ellos (la llamamos ruta del cambio climático). Esta ruta pretende por tanto ser un producto que contribuya a la generación de economía local a través de una actividad totalmente sostenible.

Para el rector, Carmelo Rodríguez, estos matorrales constituyen una rareza a nivel continental y ha señalado que "en Almería, concretamente en el Parque Natural Cabo de Gata-Nijar quedan las mejores muestras de todo el continente europeo". En cuanto al reto de este proyecto, es el de aplicar los beneficios ambientales que se derivan de estos ecosistemas tales como "el secuestro de carbono para mitigar el cambio climático, la regulación de avenidas en ramblas, o el mantenimiento de hábitats para especies de insectos útiles para la agricultura".

Con este proyecto se cumplirá con uno de los principales compromisos que la UAL tiene con la sociedad: la transferencia de conocimiento. "A través de dicho proceso pretenden concienciar a la sociedad de la importancia que tiene la conservación de los ecosistemas, para asegurar el bienestar humano ante el escenario de cambio climático y global en el que nos encontramos inmersos como consecuencia de las actividades humanas no sostenibles".

Por su parte, el delegado de Medio Ambiente en Almería, Raúl Enríquez, ha ido explicando las acciones que desde su creación, hace más de treinta años, la Junta de Andalucía ha ido haciendo para proteger los artales. Y ha señalado que "gracias al proyecto CO-ADAPTA, todos tenemos la oportunidad de cooperar en la elaboración de ese argumentario en lenguaje sencillo y asequible, que sea exponente de la fructífera alianza entre investigadores, gestores y sociedad durante más de tres décadas. El argumentario que precisamos para dar a conocer a las actuales y futuras generaciones los extraordinarios valores ambientales de un hábitat único como el artal".