José María del Nido dio la cara desde el mismo aeropuerto de Loiu antes de viajar a Sevilla. El dirigente afirmó que con su famosa frase del león consiguió los dos objetivos que quería y no se arrepintió por ello: "Yo la presión la aguanto toda y ojalá toda la presión hubiese caído sobre el presidente. Intenté dos cosas: animar a los míos para que vieran superable el fuerte ambiente y focalizar la presión de la grada hacia mí. La he centralizado al cien por ciento y de lo único de que me arrepiento es de que mi equipo no haya sido capaz de superar al Bilbao".

El mandatario analizó así el duro palo: "Estamos desilusionados, derrotados, es un momento difícil. No hemos estado a la altura del encuentro, el Athletic ha sido tremendamente superior y nosotros incomprensiblemente inferiores. Somos superiores al plantel del Athletic. Han tenido media hora magnífica, teníamos unas ganas enormes de vernos en Valencia y no hemos sido capaces. Pero el fútbol es hoy y mañana y hay que pensar en la Liga. El objetivo sigue intacto y no se nos puede ir de ningún modo". "Hemos caído en semifinales y no estamos tan acostumbrados en la historia", añadió.

A Del Nido le replicaron desde el Athletic. "Esas cosas te motivan más y al final se le ha atragantado. Ha sido demasiado grande el león para ellos", dijo David López.

También dio su opinión Palop: "Ha sido decepcionante, más deméritos nuestros que méritos de ellos. Creíamos que íbamos a hacer un gol rápido y meterles miedo. Nos vamos cabizbajos, muy descontentos, pero a partir de mañana hay que trabajar para meter al equipo en la Champions".