Una página de Internet que inculca a chicas de entre 9 y 16 años a someterse a operaciones de cirugía plástica y a seguir las dietas estrictas como medio para lograr la figura perfecta.

Según publica hoy el diario The Times, la web www.missbimbo.com propone un juego en el que los participantes vigilan el peso, el vestuario, la salud y la felicidad de un personaje virtual para crear "la chica más guay, rica y famosa del mundo".

Los contendientes compiten entre ellos y son premiados con dólares ficticios para poder pagar operaciones quirúrgicas de modificación de pecho, cirugía estética facial, pastillas dietéticas, lencería y ropa de moda para ir a la discoteca.

La página, creada por un joven de 23 años, Nicolas Jacquart, en Francia, donde ha causado ya polémica, ha empezado a funcionar en el Reino Unido y en sólo un mes ha atraído a más de 200.000 usuarios.

Sin embargo, la web ha sido criticada por organizaciones de padres, profesionales médicos y asociaciones defensores de personas que sufren anorexia, pues consideran que envía un mensaje peligroso a las niñas.

"Esto es tan letal como las páginas de Internet pro-anorexia", afirmó Dee Dawson, director de la Rhodes Farm Clinic, una clínica londinense dedicada a niñas que padecen trastornos alimentarios.

Bill Hibberd, portavoz del grupo de padres Parentkind, condenó la página y subrayó que "la inocencia de los niños debería defenderse tanto como sea posible".

Asimismo, Nick Williams, de 42 años y residente en Shrewsbury (centro de Inglaterra), se declaró disgustado por haber visto a sus hijas Katie, de 9 años, y Sarah, de 14, jugando en la controvertida página.

"Me di cuenta de que (sus hijas) estaban mirando posibles operaciones de pecho y estiramiento de cara en la clínica de cirugía plástica del juego", dijo Williams, quien calificó a los promotores de la página de "irresponsables".

Por su parte, los creadores de www.missbimbo.com consideran que el portal es "inofensivo" y que refleja cierta realidad.

El objetivo final del juego que se propone en missbimbo es un clásico: casarse con un millonario.