CORREMOS mucho peligro hoy en día en lo que se refiere a las plagas y enfermedades relacionadas con la entrada de material vegetal de otros países. A continuación intentaré explicar de una forma simple un nuevo riesgo que afecta a los cítricos en España y algunas de las causas.

No quiero dar razones científicas de los orígenes de la muerte de los cítricos, porque no soy científico. Ése es un indicio del primer riesgo que corremos en lo que se refiere a la enfermedad y plagas de las plantas: no damos importancia a las opiniones de los científicos. Prueba de ello es que se toman decisiones políticas sin tener en cuenta las opiniones y decisiones científicas. Se le da muy poca importancia a los informes de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).

Como ejemplo diré que la UE importa alrededor de 30.000 toneladas de plantas en maceta de Costa Rica, plantas que pueden traer consigo insectos o enfermedades que ponen en peligro la sanidad vegetal europea. Ésta podría ser otra de las causas del problema, es decir, los escasos controles en frontera y la libertad de importar material de países con problemas serios de sanidad vegetal.

Y por qué no, la tercera podría ser la tendencia en la UE en los últimos años de reducir las materias activas permitidas para tratamientos fitosanitarios. O lo que es lo mismo: sustancias activas permitidas en otros países para determinadas plagas o enfermedades aquí podrían estar prohibidas.

El Ministerio está trabajando para que se incluyan países desde los que se prohíba importar plantas a Europa, pero le cuesta encontrar alianzas. A los países del norte les importa poco, por ejemplo, que España tenga aproximadamente el 50 % de la superficie de cítricos de Europa; o Italia el 32,4%; Grecia el 11,85%; y Portugal el 5,3%. Pero es que no les importa, ni sabiendo que los cítricos en Andalucía pueden suponer 3,5 millones de jornales. Esta causa es otra, es decir, el poco peso de los países del Mediterráneo en la Unión Europea.

Muy recientemente se ha detectado un insecto en Galicia llamado psila africana (Trioza erytrea) que se caracteriza por trasladar la bacteria que produce la enfermedad denominada Huanglongbing , o greening de los cítricos, que es considerada como una de las enfermedades más destructiva de los cítricos: produce la muerte y se caracteriza por la rapidez con la que se dispersa. Son millones de árboles los que se han arrancado en Brasil o Florida, por ejemplo. El pasado lunes, día 23, en el boletín oficial de Galicia se publicaban las medidas a tomar en la comunidad tras la detección de dicho insecto, aunque fue detectado en 2014.

Kilómetros más abajo, el mismo lunes, la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía anunciaba un plan de vigilancia al respecto que incluye documentación elaborada en enero de 2015 en lo que se refiere a los insectos vectores diciendo lo siguiente: al no estar presente en el territorio nacional, y por todo ello en la comunidad autónoma de Andalucía, se recomienda como método de control comunicar al Servicio de Sanidad Vegetal de la Dirección General de la Producción Agrícola y Ganadera toda aparición de los síntomas de la enfermedad anteriormente descrita, así como la sospecha de presencia de sus insectos vectores.

¿Cómo es que no ha sido informada la Consejería de Agricultura de que el insecto que actúa de vector se detecto en 2014 en Galicia? Ésta es otra de las razones por las que estamos en riesgo: la falta de comunicación y coordinación, y el equivoco de la trasferencia de competencias en temas tan importantes como puede ser la sanidad vegetal.

Para que lo entendamos: la Consejería de Agricultura trabaja ahora para explicar un plan de vigilancia, y dice al agricultor que avise cuando detecte el insecto, y resulta que el insecto lleva meses en Galicia.

Podemos decir con toda certeza que el riesgo de entrada de la enfermedad que produce la muerte de los cítricos ha cambiado de unos meses a hoy. El riesgo es ahora un 50% mayor, ya que antes no estaba ni el insecto ni la bacteria, y ahora tenemos constancia de que está el insecto.

Por último, quisiera decir que Asaja Córdoba encargó un informe , en referencia a la mancha negra de los cítricos, a un doctor en Derecho Internacional de la Universidad de Córdoba que concluyó que la inacción de las autoridades europeas en materia de sanidad vegetal podía llevar a responsabilidades extracontractuales. El informe se ha entregado en la Comisión y el Parlamento Europeo y esperemos hagan más caso y se tomen soluciones, para evitar los daños que pudiera producir el comercio con países en riesgo.

El plan de vigilancia de los cítricos de la Junta de Andalucía se puede consultar en www.asajacordoba.es.