Cajamar acaba de publicar el informe 'Innovación en la gestión y modernización de la producción en una cooperativa citrícola', una monografía de algo más de 60 páginas que recoge los mecanismos para administrar una cooperativa dedicada al sector de cítricos de la forma más sostenible económica y socialmente.

El proyecto promueve un modelo de innovación en la gestión y modernización de la producción citrícola de la Cooperativa Rural Sant Vicent Ferrer de Benaguasil. Además, apuesta por la gestión en común, la reconversión varietal y la adaptación del calendario productivo a las necesidades del mercado, con mayor aprovisionamiento de producción propia.

El proyecto se basa en la Cooperativa Rural Sant Vicent Ferrer de Benaguasil (Valencia)

Con Lorena Tudela Marco y José María García Álvarez-Coque como autores, el proyecto es el resultado de la acción conjunta del Grupo Cooperativo Cajamar (entidad financiadora y evaluadora del proyecto), el Departamento de Economía y Ciencias Sociales de la Universitat Politècnica de València (sistematiza las fases del proyecto) y la Cooperativa Rural Sant Vicent Ferrer de Benaguasil, principal entidad impulsora del proyecto. Se trata por tanto de una actividad de innovación social de intercambio de conocimiento fruto de una colaboración público-privada.

Esta iniciativa persigue redimensionar y modernizar la producción de la Cooperativa a través de dos vías de implementación: por un lado, por iniciativa directa del socio; y por otro, a través de un modelo de cesión.

En ambos casos la gestión de las parcelas se ajustará a las necesidades estudiadas por la Cooperativa de acuerdo a su planificación comercial. El objetivo principal es fomentar la viabilidad a largo plazo de la Cooperativa Rural Sant Vicent Ferrer de Benaguasil como medio para asegurar la rentabilidad de la producción de sus socios. Asimismo, el estudio servirá de guía u orientación para iniciativas similares en otras entidades.

El sector agroalimentario es estratégico para la sociedad valenciana y cuenta también con amplia presencia en la provincia de Almería. La viabilidad de nuestro modelo productivo se ha visto enfrentada a problemas estructurales derivados de la pérdida de rentabilidad, el abandono, la escasa movilidad del mercado de tierras y una insuficiente adaptación al mercado. Estos problemas se pueden solucionar con alternativas reales que impulsan nuevos procesos productivos vinculados a estrategias de comercialización. Las iniciativas de gestión común, los bancos de tierras y otras experiencias de innovación social son herramientas para posibilitar explotaciones viables y procesos de reestructuración que generen valor añadido y sean respetuosos con el territorio y el medio ambiente.