El Ayuntamiento de Adra y la Junta de Andalucía han acordado colaborar para llevar a cabo, en las próximas semanas, una serie de trabajos de limpieza y eliminación de las malas hierbas y restos vegetales ubicados en la Reserva Natural de Las Albuferas y su entorno y para la ejecución de esta actuación compartirán medios materiales y humanos.

Así lo ha informado el alcalde de Adra, Manuel Cortés, después de mantener una reunión de trabajo con la Jefa de Servicio de Espacios Naturales Protegidos de la Delegación de Medio Ambiente en Almería de la Junta de Andalucía, Rosa María Mendoza.

Al encuentro también han asistido los concejales de Medio Ambiente y Agricultura, César Arróniz y Francisco López, así como técnicos del Ayuntamiento de Adra, la Junta de Andalucía y representantes de la Guardia Civil y Policía Local.

"Desde el Ayuntamiento de Adra vamos a seguir trabajando en la protección y el mantenimiento de Las Albuferas, un espacio natural de enorme riqueza medioambiental, por ello vamos a colaborar para llevar a cabo estos trabajos de limpieza, que tienen como finalidad mejorar el aspecto de esta Reserva Natural que disfrutan abderitanos y visitantes", ha afirmado el alcalde.

Manuel Cortés ha destacado la "voluntad de cooperación existente entre ambas administraciones para reforzar la protección y cuidado del humedal de Las Albuferas". A este respecto, ha explicado que, además de estos trabajos de limpieza, también se ha planteado la posibilidad de llevar a cabo, en el marco del programa de acción social en espacios naturales que financia la Fundación La Caixa, distintas acciones orientadas a potenciar este espacio natural, tales como, restauración y mantenimiento de infraestructuras de uso público, control de especies exóticas y actividades de educación ambiental. En este sentido, cabe señalar que está prevista la celebración de una actividad en próximas semanas coincidiendo con la conmemoración del Día Mundial de la Biodiversidad.

De otra parte, se ha valorado la necesidad de continuar haciendo hincapié en la obligatoriedad de los agricultores de deshacerse correctamente, es decir, a través de gestores autorizados, de los residuos generados en el desarrollo de su actividad.