Este sábado 27 de noviembre se celebrará una “bicifestación” convocada por el colectivo de ciclistas urbanos de Almería (ALPEDAL) recorrerá las calles del centro de la ciudad para de una manera lúdico-reivindicativa exigir una movilidad más sostenible que garantice la seguridad de peatones y ciclistas o el aumento y conservación de los carriles bici de la trama urbana. El acto comenzará a las 12 de la mañana en la Puerta Purchena con un pequeño taller de puesta a punto de las bicicletas, para a continuación recorrer el Paseo de Almería, la avenida Cabo de Gata, la avenida del Mediterráneo, la calle Padre Méndez, carretera de Ronda, Gregorio Marañón y descender por la avenida García Lorca hasta Las Almadrabillas, finalizando en la explanada de la ballena con la lectura del manifiesto reivindicativo confeccionado para la ocasión y que previamente será entregado en el registro general del ayuntamiento de Almería.

ALPEDAL vine reclamando desde hace años una mayor implicación del ayuntamiento de la capital así como del gobierno autonómico en el fomento de la movilidad sostenible en la ciudad, y por eso exige que en los presupuestos para el próximo año, ambas administraciones destinen partidas económicas con las que poder abordar la conexión entre sí de los carriles bici existentes, o para unir la ciudad por el norte con la universidad, la Cañada, el Alquián y Retamar. Igualmente pide la realización de un estudio de viabilidad para la creación de un carril bici en la N-340 uniendo Aguadulce con Almería y otro para conectar el Toyo con Cabo de Gata por el litoral; propuestas que ya figuraban en el Plan Andaluz de la Bicicleta para el periodo 2014-2020.

La eliminación de los puntos negros que aún se mantienen en parte de la infraestructura ciclista, el mantenimiento periódico del pavimento de los carriles bici existentes y su correcta señalización, junto con la instalación de mayor número de aparcabicis en las inmediaciones de los centros educativos, los lugares de ocio y las zonas comerciales; también serán elementos reivindicados por la familia ciclista que se dará cita este sábado en dicha bicifestación. Y es que a juicio de los convocantes, si Almería quiere convertirse en una ciudad sostenible en la que se lleve a cabo una reducción significativa de las emisiones de gases de efecto invernadero deberá disminuir de una manera sustancial su tráfico motorizado y favorecer el transporte público y la movilidad peatonal o en bicicleta en la mayoría de los trayectos urbanos que la ciudadanía realiza de forma cotidiana.

Algo que será obligatorio como consecuencia de los compromisos de descarbonización que nuestro país ha contraído para el año 2030, y que el ayuntamiento ya avanzó en 2019 con la aprobación por unanimidad de una moción de declaración de emergencia climática; que recogía entre otras medidas: la potenciación de la movilidad sostenible, la creación de nuevos espacios peatonales y la ampliación de los ya existentes, el fomento del uso de la bicicleta y otros medios de transporte no contaminante, o el aumento de los carriles bici y ciclocalles para incentivar los desplazamientos rápidos, seguros y sostenibles de toda la población.