La remodelación de la plaza Careaga, en el casco histórico de la capital, le supondrá al Consistorio de Almería una mayor inversión de la prevista y a los residentes en la zona, convivir con las obras durante más tiempo del que pensaban. Son los imprevistos que han surgido.

La empresa adjudicataria de la ejecución del proyecto de remodelación integral de la plaza Careaga, Facto, ha presentado a la Gerencia de Urbanismo un modificado de obra, que ha sido aceptado por los técnicos municipales y el equipo de gobierno, el cual ha dado su visto bueno en una reciente Junta Local.

Dicho modificado implica un incremento del 8,3% del coste de la remodelación, que fue adjudicada a Facto por 645.877 euros redondeados. Son 53.855 euros más los que ha requerido la constructora al toparse con “una enorme cantidad de infraestructuras soterradas”, sobre todo en las calles más estrechas del entorno de la plaza, dentro del ámbito de actuación, como Conde Ximena, Emilio Ferrera y Arco.

Según las justificaciones aportadas, la existencia de redes de suministro situadas por encima de las tuberías de saneamiento han imposibilitado la renovación de las mismas, siendo la solución la rehabilitación de las ya existentes. Añade la adjudicataria que ha visto obligada a emplear medios manuales en las excavaciones y a la contratación de domper de pequeño tamaño para el transporte de tierras.

El resultado de estas complicaciones es el incremento del presupuesto y también del plazo, que suma 13 días a los 5 meses fijados, según la autorización del Ayuntamiento. Los trabajos comenzaron el 8 de enero, quedaron suspendido el 16 de marzo y fueron retomados el 20 abril.