Con el objetivo de recaudar fondos para los nuevos proyectos y conmemorar el 20 aniversario de la constitución de la Fundación Trade, se celebró la noche del sábado una cena solidaria en las instalaciones que el Centro tiene en la calle José María Acosta. Hace 20 años acogían el cine y la terraza Moderno, de inolvidables recuerdos para toda una generación de almerienses, y la generosidad de su propietario, el empresario Juan Asensio Rodríguez, se transformó en una donación para que Trade pudiera atender a las personas con trastornos generalizados del desarrollo mediante la creación de un Centro de Educación Especial y poder mejorar su calidad de vida y la de sus familiares.

La velada organizada contó con la presencia de numerosas personas que quisieron contribuir con los proyectos que pretende llevar a cabo Trade, concretamente una Unidad de Día, con un coste de 37.000 euros, y una residencia para la que el Ayuntamiento de Roquetas ya ha cedido un terreno en Las Salinas. Ante estos proyectos, todos los esfuerzos son muy valorados y así lo expresó Juan Asensio, muy satisfecho con la solidaridad de las personas que participaron en la cena, "aunque he echado de menos la presencia de representantes de las instituciones y las administraciones". Sín embargo, Asensio no puede decir lo mismo de la "poca colaboración de la Policía Local" al presentarse en las instalaciones para solicitar que concluyera la actuación que al final de la cena estaba realizando Chicho con su música de flamenco fusión. También hay que destacar la actuación de 'El Gran Manley', "un mago que hizo las delicias, no sólo de los más pequeños y jóvenes, sino de todos los asistentes".

La presidenta de la asociación, Mari Ángeles Asensio, también expresó su satisfacción por este acontecimiento que contribuirá a hacer posible un día los proyectos de Trade y por conmemorar el vigésimo aniversario en que su padre donó las instalaciones para la construcción del colegio. Como muchas otras madres con hijos autistas u otro tipo de trastornos del desarrollo, conoce en primera persona el sacrificio y la lucha diaria que supone intentar ofrecer lo mejor a sus hijos y procurarles la mayor independencia posible. Por eso se creó este Centro, que en la actualidad cuenta con 30 usuarios de edades comprendidas entre los 6 y 54 años, atendidos por grandes profesionales que se entregan en cuerpo y alma a quienes más les necesitan.