La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a tres años y once meses de prisión a un joven que golpeó durante meses a su novia y lo declara absuelto de un delito de agresión sexual por el que la Ficalía pedía ocho años de cárcel al no considerarse probado que el acusado forzara a su pareja.

El fallo de la Sección Tercera, al que ha tenido acceso Efe, declara probado que el 17 de mayo de 2015 el procesado Y.H. se encontraba en su domicilio de Almería, cuando llegaron la novia, una prima de esta joven y el novio de esta última.

En la casa, la prima y su novio se introdujeron en un dormitorio y en otro entraron Y.H. y la chica, donde mantuvieron relaciones sexuales, tras esto la joven se reunión con su prima, se marcharon de la vivienda y unos días más tarde Y.H. fue al domicilio de la chica y pidió a sus padres casarse con ella, iniciando entonces una relación de "noviazgo".

Los magistrados señalan que la joven perdió la virginidad pero no consideran probado que ese acto sexual fuese contra su voluntad o el acusado la forzara a ello.

Por esta razón, Y.H. ha sido absuelto del delito de agresión sexual por el que el fiscal solicitaba ocho años de prisión, otros ocho años de libertad vigilada y una orden de alejamiento de 500 metros durante nueve años.

En ocasiones la golpeaba

"Desde el inicio de esa relación, el procesado controlaba a la mujer en el horario y con quién se relacionaba y en ocasiones, la golpeaba o le decía frases, para que sintiese miedo, como que si le denunciaba iba a dejarla muerta en vida y que la iba dejar en una silla de ruedas", según el fallo.

Los magistrados subrayan que a finales de agosto de 2015, cuando la pareja volvía sobre las cuatro de la madrugada de la Feria de Almería, en las inmediaciones de la casa de Y.H. se inició una discusión entre ambos en la que el procesado propinó a la víctima un puñetazo en la cara, la tiró al suelo, la arrastró hasta su vivienda y en el dormitorio siguió golpeándola en el rostro y en el cuerpo, mientras la desnudaba, cesando al llegar un compañero que vivía también en la casa.

La agredida estuvo unos días sin ir a su domicilio familiar para que "no le viesen la cara golpeada", sin acudir a un centro médico.

Además en noviembre de 2015, cuando ambos estaban en la vivienda de Y.H., éste cogió "fuertemente" del cuello a la mujer y la dejó caer, lo que provocó que quedase conmocionada en el suelo y al despertar de dicha conmoción, el procesado le puso una katana en el cuello y le dijo que un día de esos "la iba a matar".

La víctima presenta una "sintomatología ansiosa-depresiva, clínicamente significativa, con síntomas también significativos de trastorno de estrés postraumático".

Y.H. ha sido condenado a un año y medio de cárcel por un delito de malos tratos habituales, a penas de diez y ocho meses por dos delitos de maltrato concreto en el ámbito de la violencia sobre la mujer, a nueve meses de presidio por un delito de amenazas en el ámbito de la violencia sobre la mujer y se le prohíbe comunicarse y aproximarse a menos de 500 metros durante doce años a la víctima, a la que deberá indemnizar con 6.000 euros en concepto de responsabilidad civil.