El Juzgado de lo Penal número cuatro de Almería ha condenado a seis meses de prisión a un gerente de la Cítricos del Andarax SA por vertidos de aguas residuales sin depurar, procedentes de la estación de bombeo de la planta de dicha sociedad, que también ha sido condenada al pago de una multa. El fallo, al que ha tenido acceso EFE, puede ser recurrido ante la Audiencia Provincial de Almería e impone también al gerente un año de inhabilitación especial para profesión u oficio relacionado con gestión de aguas residuales industriales.

La sentencia declara probado que la acusada ‘Cítricos de Andarax’ SA explota una factoría en la localidad de Gádor, dónde se tratan y transforman materias primas vegetales para la “fabricación de zumos, gazpachos, cremas y sopas”. Según el fallo, el 8 de noviembre de 2011 la empresa recibió autorización para realizar vertidos de aguas residuales industriales, en “un punto concreto, y sometida a determinados condicionantes relativos al caudal máximo diario, procedimiento para su depuración y límites máximos en PH, sólidos en suspensión, DB05 y DQO”.

Sin embargo, los días 1 y 13 de febrero de 2018 y los días 27 de marzo y 1 de abril de 2019 debido, respectivamente, al "deficiente funcionamiento de la depuradora y a la falta de adaptación de la producción a las obras que se estaban acometiendo para la mejora de la misma”, se produjeron vertidos de aguas residuales sin depurar, procedentes de la estación de bombeo.

No obstante, no ha resultado acreditado que dichos vertidos ocasionasen un grave riesgo para el "equilibrio de los sistemas naturales", tal y como sostenía la Fiscalía, que había interesado una pena de dos años de prisión para el gerente acusado. “A día de hoy la empresa cumple escrupulosamente con la normativa en materia de vertidos, habiendo realizado una notable inversión en el sistema de depurado de la planta”, añade la sentencia.

Por estos hechos, Cítricos del Andarax SA ha sido condenada por un delito contra el medio ambiente a 6 meses de multa, a razón de cuota diaria de 50 euros, lo que comporta un total de 9.000 euros, delito por el que también ha sido condenado dicho gerente a las citadas penas de cárcel e inhabilitación, además de a 10 meses de multa, a razón de cuota diaria de 5 euros, un total de 1.500 euros.