En las últimas 48 horas los vecinos de Costacabana tienen mucho de qué hablar. Han recuperado su icónica palmera tras proceder el Ayuntamiento a la plantación de un nuevo ejemplar que, desde ayer, sustituye a la que fuera derribada por la borrasca Elsa en diciembre de 2019. La playa es el denominador común de las conversaciones vecinales, ya que su uso, en concreto el canal náutico, ha sembrado la discordia en el barrio, si bien las discrepancias han podido superarse con el acuerdo de una nueva ubicación que los representantes vecinales trasladarán al Consistorio.

El inicio oficial de la temporada de verano ha traído al barrio la esperada palmera y los elementos y servicios del Plan de Playas. De la misma especie (datilera) y con cuatro metros de altura, el nuevo ejemplar fue plantado en la mañana de ayer con ayuda del alcalde, un momento “emocionante” en el que Ramón Fernández-Pacheco expresó que le “hubiese encantado poder haberlo hecho antes, pero los expertos –explicó– nos informaron de que el mejor momento para plantar una palmera de estas características y que dure, al menos, medio siglo como su antecesora, era hacerlo en el mes de junio. El año pasado, por la pandemia, fue imposible y por eso lo hacemos ahora”.

Queda pendiente, entre otras cuestiones del barrio, resolver el conflicto que ha generado el canal náutico instalado, en una reunión concertada, para el próximo martes, entre el concejal de Promoción de la Ciudad y los representantes de la asociación vecinal Bahía de Costacabana. Pedirán a Carlos Sánchez, que reubique el canal instalado, de forma errónea según los vecinos, junto a la silla de los socorristas para situarlo al lado del puesto de socorrismo y el segundo, al final de la playa, al lado del último espigón.

Entienden que así se salvaría la invasión de las embarcaciones en una de las zonas con más presencia de niños, sin accesibilidad para los coches al estar el paseo marítimo y, además, con una profundidad del agua escasa, razón por la que alguna embarcación ha llegado hasta encallarse.

Carmen Mateos con representantes de la asociación vecinal, en contra de la ubicación actual del canal náutico

Grupos de vecinos con opiniones dispares coincidían en el punto convocado para la protesta