La planta de tratamiento de residuos agrícolas, Ejido Medio Ambiente, continúa sin abrir a pesar de contar con la autorización de la delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, que decidió levantar las medidas cautelares sobre la gestión de la planta el pasado lunes, tras las protestas de los agricultores por la acumulación de residuos vegetales en el Poniente.

Se da el hecho, además, de que continúa el litigio entre Morgan Aqua y los hermanos Lirola por su propiedad, aunque, de momento, sigue estando gestionada por los segundos, después de que el pasado mes de julio Morgan Aqua denunciara la ocupación ilegal de la planta por parte de los Lirola y los culpara, además, del incendio.

La expectación entre los vecinos de El Ejido es grande, tras el anuncio de su inminente apertura que, sin embargo, tarda en llegar. Son muchos los agricultores que necesitan ya deshacerse de los residuos vegetales, principalmente los que comienzan a arrancar las plantaciones más tempranas.

La Junta decidió paralizar la actividad de la planta tras el incendio del pasado nueve de agosto, que se prolongó en el tiempo hasta un mes. De hecho, el expediente sancionador que se abrió para investigar una posible negligencia en torno a los hechos que provocaron el fuego sigue su curso, pues se trata de un trámite administrativo "muy complejo" que hay que estudiar con detenimiento para conocer si la planta incurrió o no en un delito muy grave.

Actualmente, según ha transmitido la delegada provincial de Medio Ambiente, Sonia Rodríguez, Ejido Medio Ambiente cumple ya con las condiciones necesarias para la gestión de los residuos orgánicos tras haberse reparado los daños del incendio.

Entre las actuaciones que se han desarrollado en la planta se encuentran la reactivación de la red de hidratantes a fin de evitar nuevos incendios, la restauración del vallado exterior, la reposición de la maquinaria afectada y la adecuación de los sistemas de recogida.

Por otro lado, la candidata socialista a la alcaldía de El Ejido, Guadalupe Fernández, aludía, a la mala imagen que podría dar la provincia de no abrirse la planta para el tratamiento de los residuos agrícolas, ya que hasta ahora los agricultores no tenían donde llevarlos. Precisamente, la candidata socialista aseguraba haber recibido en las últimas semanas "numerosas quejas por parte de agricultores preocupados ante la acumulación de residuos vegetales generados durante la campaña de otoño".