La Fiscalía de Almería ha interesado una pena de cuatro años de prisión para un joven acusado de apropiarse de un vídeo sexual de una amiga y posteriormente compartirlo con otros conocidos.

El escrito de acusación provisional de la fiscal explica que el acusado se quedaba a dormir en casa de la víctima, su amiga, cuando "tenía problemas familiares".

Así, en algún momento entre 2019 y 2022 aprovechó presuntamente una de estas pernoctaciones para coger el teléfono móvil de la chica.

De acuerdo al Ministerio Público, cuando vio un vídeo que contenía relaciones sexuales de su amiga con su novio, se lo reenvió por WhatsApp y posteriormente lo difundió a varias personas.

Por estos presuntos hechos, la fiscal acusa al joven por un delito de descubrimiento y revelación de secretos, por el que pide cuatro años de prisión y el pago de una indemnización de 6.000 euros por los daños morales.

Según diligencias policiales a las que ha tenido acceso EFE, aunque se negó a declarar en la Comisaría, cuando la Policía Nacional se personó en casa del acusado éste reconoció de manera "voluntaria y espontánea" que se había enviado el vídeo, aunque matizó que sólo se lo había pasado a un amigo.

Asimismo, la víctima aportó una grabación en la que de "manera cristalina" se reproducía una conversación entre la denunciante y el acusado, en la que éste "le confiesa la autoría de los hechos, arrepintiéndose y pidiéndole perdón en reiteradas ocasiones".

Un amigo común de ambos manifestó a la Policía que el procesado le había mostrado el "vídeo íntegro" en un "botellón" junto a varios amigos más; mientras que otro explicó que se lo había remitido por una red social aunque enviado de forma que sólo pudo reproducirlo una vez