El número de casos de gripe comienza a descender después de alcanzar el pico máximo. Durante la última semana (7), tal y como han informado desde la Delegación de Salud de la Junta, la incidencia ha sido de 136,24 casos por 100.000 habitantes, una cifra que pone de manifiesto que el virus comienza a caer después de registrarse el pico máximo en la semana cinco con un total de 166,56 casos.

En la anterior temporada el virus sobrepasaba la tasa más alta en las primeras semanas de enero en las que llegó a los 228,58 casos por 100.000 habitantes, según los datos del Sistema de Vigilancia de Gripe de Andalucía. La tasa acumulada durante la temporada 2017-2018 fue de 1.726,8 casos por 100.000 habitantes, lo que supuso una aumento del 49% en comparación con la temporada previa (tasa de 1.162,2 por 100.000 habitantes).

La gravedad clínica de los casos fue semejante a las temporadas previas en las que ha predominado el AH3 y el B. El momento de mayor incidencia se produjo en la primera quincena de enero, cuando se alcanzó una tasa de incidencia de 230 casos por cada 100.000 habitantes.

La gripe afectó casi por igual a los dos sexos, ya que el 45% de personas afectadas fueron hombres y el 55% mujeres. Por edad, la mayor incidencia se concentró en el grupo de 5 a 14 años (tasa 2.759 por 100.000), y en el grupo de 0 a 4 años (tasa 2.206 por 100.000), mientras que el grupo de mayores de 65 años volvió a ser el menos afectado (tasa 1.028 por 100.000), lo que podría deberse a la vacunación sistemática de esta población así como a una inmunidad adquirida.

En cuanto al porcentaje de personas mayores de 65 años vacunadas, Almería alcanzó el 59% de cobertura durante la campaña de vacunación de la temporada pasada. En total, se administró la vacuna a 82.764 personas.