Almería

Instalan cámaras para un mayor control del área marítima y litoral

  • La Consejería de Medio Ambiente coloca un sistema de vigilancia para evitar las infracciones ambientales en el parque

La Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio ha reforzado la vigilancia en la zona litoral y marítima del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, con la instalación de cámaras de vídeo. Con el sistema de videovigilancia se controlará mejor dicho ámbito para tratar de impedir las infracciones ambientales en el espacio protegido que se producen con la pesca furtiva. Este sistema de vigilancia será de gran utilidad para todas las administraciones con competencias en el ámbito marítimo y litoral.

La vigilancia pasiva con cámaras de vídeo se suma a la vigilancia activa que se viene realizando en el litoral con embarcaciones de la Junta de Andalucía, del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, gracias a cuya actuación se está consiguiendo la aprehensión de pescadores furtivos en el litoral del Parque.

El nuevo sistema videovigilancia -en pruebas desde hace varios meses- permite conocer en tiempo real las actividades que se desarrollan en buena parte del litoral del Parque. Consiste en una cámara implantada en un dispositivo remolcable y operada de forma remota. Esta cámara capta imágenes que son transmitidas a la estación de control, donde un operador puede apreciar con suficiente nitidez el desarrollo de actividades en varias zonas, así como evaluar la necesidad de dar una respuesta activa de las administraciones. De esta forma, según el delegado territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, José Manuel Ortiz, "el litoral del Cabo de Gata-Níjar dispone de una importante herramienta para su gestión, así como para la protección de sus valores, que como en el medio terrestre, no dejan de estar amenazados".

El delegado de Medio Ambiente afirma que la decisión de reforzar la vigilancia está más que justificada, "ya que el litoral del Parque Natural, con una anchura de una milla marina, es una de sus zonas más frágiles e importantes, y su conservación es prioritaria para el primero de los espacios protegidos andaluces que fue declarado Parque Natural marítimo-terrestre. Y es que, por su riqueza y biodiversidad, los fondos marinos de este espacio protegido constituyen un espectacular escenario y foco de atracción para miles de personas que los visitan para bañarse, practicar la pesca artesanal, hacer trabajos científicos o realizar actividades náuticas o subacuáticas, pero por su riqueza, también está en el punto de mira de desaprensivos que realizan acciones prohibidas".

Consciente de esta importancia, la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta, junto con otras administraciones y con la colaboración de los sectores pesquero y turístico, viene desarrollando actividades y proyectos tendentes a proteger y conservar este medio, así como divulgar sus valores entre los usuarios de las costas.

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