Cobre, motores, maquinaria, animales o productos agrícolas, todo cabe en el "saco" de los amigos de lo ajeno que se ceban con las zonas rurales. Robos y más robos que llevan en múltiples ocasiones, a los propietarios de las fincas agrícolas a vigilar ellos mismos cada noche su explotación. Algo que desde las organizaciones agrarias han asegurado reiteradamente que no es la solución. Ahora, el campo ejidense estará más protegido. El Ayuntamiento de El Ejido ha incrementado la seguridad en las zonas rurales para lo que se ha ampliado el servicio de patrullas rurales de Policía Local a cuatro.

Un incremento muy importante "ya que se pasa de dos agentes, los que hasta ahora componían las patrullas rurales en el municipio, a un total de nueve policías", afirmaba el alcalde de El Ejido, Francisco Góngora. Asimismo, se han incrementado los medios materiales con dos vehículos todoterreno, dos motocicletas y dos Quads. "Para este equipo de Gobierno la vigilancia en el campo es vital y, por ello, estamos haciendo este gran esfuerzo en una situación de serias dificultades económicas", ha puntualizado el primer edil.

En los últimos meses, según datos oficiales, del Ministerio del Interior, el índice de delincuencia ha bajado tanto en los núcleos urbanos como en las zonas rurales. Pese a ser una noticia positiva hay que tener en cuenta dos aspectos, por un lado el hecho de que existe un repunte en el índice de robos en el campo en determinadas épocas del año, y por otro, que siguen siendo muchos los agricultores que declinan denunciar cuando son víctimas de robo en sus explotaciones, ya que muchos de ellos, lo consideran inútil. Por ello, la intención del equipo de Gobierno, según manifestaba el propio regidor es "trabajar de forma intensa y estrecha con los agricultores, porque es cierto que, a pesar de que los índices de delincuencia han bajado, sigue habiendo robos en el campo que se agudizan en determinadas épocas del año, sobre todo cuando los géneros están más caros, por lo que es en esos momentos en los que hay que intensificar la vigilancia". El hecho de que la Policía Local dé mayor cobertura a las zonas rurales supondrá además, señalaba Góngora, "un elemento disuasorio para prevenir actos delictivos en nuestro campo".

Pero esta vigilancia necesita igualmente de la implicación de los agricultores, "para que colaboren denunciando posibles comportamientos que no se ajusten a la legalidad, con el fin de que la respuesta de este servicio sea aún más rápida y efectiva" ha añadido. A su juicio, esa colaboración es vital ya que "junto al trabajo de estos Policías, de la Guardia Civil y al de los agricultores vamos a ver cómo nuestro campo estará muchísimo más seguro". Asimismo, el alcalde ha anunciado que en las próximas semanas se celebrará una Junta Local de Seguridad que estrechará aún más esa colaboración con la Guardia Civil "porque ellos también están dispuestos e ilusionados en este sentido", sostenía.