Tribunales

Policía apunta tres supuestas agresiones a mujer muerta a manos presuntamente de su pareja en Albox

  • Con respecto al maltrato habitual por el que M.P., de 39 años y nacionalidad lituana, enfrenta tres años de prisión al margen de la pena de 13 años de cárcel como autor de un presunto homicidio, los agentes han desgranado tres episodios en 2014, 2015 y en 2016 y han indicado que le constan al menos dos detenciones por violencia de género

Audiencia Provincial de Almería.

Audiencia Provincial de Almería.

Agentes de la Policía Local de Albox (Almería) han indicado este martes ante el jurado popular por la muerte de una mujer en marzo de 2018 a manos presuntamente de su compañero sentimental que intervinieron en, al menos, tres ocasiones por supuestas agresiones de este a la víctima, "quien siempre decía que no quería poner denuncia contra él porque lo quería y se sentía protegida".

Dos de los funcionarios han confirmado, asimismo, que el mismo mes marzo de 2018 elaborarón un informe para Servicios Sociales en el que se informaba de su "deterioro físico" después de acudir a socorrerla "porque estaba tirada en el suelo, sin fuerzas para levantarse" y han añadido que no era la primera vez.

"No tenía masa muscular y nos dijo que tenía la muerte cerca", ha dicho uno de los agentes que ha declarado por videoconferencia desde los juzgados de Huércal-Overa en la misma línea que uno de sus compañeros, quien ha descrito el estado de salud de la víctima, quien padecía adicción crónica al alcohol, con un gráfico "era todo hueso y pellejos".

Con respecto al maltrato habitual por el que M.P., de 39 años y nacionalidad lituana, enfrenta tres años de prisión al margen de la pena de 13 años de cárcel como autor de un presunto homicidio, los agentes han desgranado tres episodios en 2014, 2015 y en 2016 y han indicado que le constan al menos dos detenciones por violencia de género.

Con respecto a 2014, uno de los policías que ha depuesto como testigo ha señalado que acudieron al domicilio que la pareja compartía tras una denuncia vecinal por "el escándalo". "Ella abrió la puerta con arañazos" y un "ojo morado" según ha apuntillado un compañero si bien, a preguntas de la defensa, han asegurado que "presencialmente nunca vimos una agresión".

"Era normal que los vecinos llamarán por el jaleo que formaban. Los dos estaban siempre bajo los efectos del alcohol y ella comentó que las lesiones se las había hecho él esa misma noche", ha dicho el agente, quien ha precisado "que nunca ponía denuncia aunque siempre hemos intentado que estuviese atendida".

Con respecto a 2016, los policías locales han declarado que fue ella la que llamó en esta ocasión, por lo que M.P. fue detenido por la Guardia Civil y ella "trasladada al un centro de salud". "Nunca llegó a denunciarlo porque decía que le quería y que él lo hacía por celos", han insistido.

Por último, a preguntas de la defensa alguno de los funcionarios ha asegurado que "solían caerse mucho, bastante, ebrios" en la calle y que "teníamos que socorrerlos para ayudarlos a llegar a su vivienda, sucia, desordenada, con excrementos de perro".

EL PROCESADO SOSTIENE UNA CAÍDA ACCIDENTAL COMO CAUSA DE LA MUERTE

El procesado aseguró el lunes ante el tribunal de jurado que se celebra en la Audiencia Provincial de Almería que la víctima se "golpeó en la cabeza" porque se "cayó en el cuarto de baño" debido a su adicción al alcohol y ha negado que le "tocase ni con un dedo" a lo largo de una relación que se inició en 2014.

"Sólo la sujetaba para que se tranquilizara", apuntilló para añadir que la supuesta caída que desembocó en su muerte se produjo en la noche anterior al fallecimiento el 30 de marzo de 2018 y que, después de esto, ella, que pesaba 37 kilos y medía 1,50 metros, se "acostó y al día siguiente se despertó como si nada".

"Le tapé la herida que tenía detrás de la cabeza, la llevé en brazos a la cama, la dejé sentada, le di medicamentos y se durmió", relató en una declaración confusa y en la que habría "incurrido en numerosas contradicciones" con respecto a lo que indicó en instrucción según remarcó el fiscal.

Achacó, asimismo, las "continuas lesiones y heridas" que presentaba ella a "las muchas caídas que tenía en la calle" y tras las que "tenía que ir a recogerla o la recogía la Policía Local".

El fiscal sostiene que, si bien el jurado popular debe dirimir "si se trató de una caída o de una paliza", M.P. sabía que "los golpes que le propinaba le podían conducir a la muerte debido a su constitución física y a su malnutrición" pero que, aún así, "no llamó a una ambulancia, por lo que pasaron entre seis y ocho horas hasta que falleció".

Mantiene, asimismo, que la muerte "no fue un hecho aislado sino fruto de un proceso de violencia que degeneró y se agravó en el tiempo" y que la víctima "no se resbaló y cayó sino que debido a los golpes que le propinó el acusado cayó hacía atrás y se golpeó".

Por su parte, el letrado de la acusación particular en la causa, en la que también figura como personada la Junta de Andalucía, afirmó que el procesado "nunca ha dado una versión verosímil y lógica" de lo que ocurrió el 30 de marzo de 2018 en aquella vivienda de Albox y que, en realidad, "la apalizó y la llegó a patear cuando ya estaba en el suelo".

Por su parte, el abogado de la defensa apeló en todo momento a la presunción de inocencia de su patrocinado y enmarcó las discusiones de la pareja "en lo normal de dos alcohólicos que viven juntos y están abandonados en sus cuidados esenciales" sin que "exista prueba alguna de maltrato".

LA VÍCTIMA FALLECIÓ "TRAS HORAS DESANGRÁNDOSE"

La Fiscalía interesa para M.P. por un delito de homicidio 13 años de prisión y otros tres más por el delito de maltrato habitual, así como 15 años adicionales de libertad vigilada.

Según su relato, la víctima habría fallecido varias horas después de que fuera golpeada debido a una abundante pérdida de sangre, de modo que el acusado tuvo tiempo para reaccionar, si bien no llamó a los servicios de emergencia hasta que no estuvo muerta.

La mujer estaba, según sostiene, "muy enferma y debilitada hasta el punto en el que tenía problemas para mantenerse en pie y caminar por sí sola cuando se originó la discusión en el baño en la que el acusado le habría propinado un puñetazo a la mujer en el ojo izquierdo.

Del impacto, la víctima habría caído hacia atrás, de forma que su cabeza impactó contra una estantería, lo que le ocasionó un importante herida en la cabeza, según reconstruye el fiscal a partir del sumario.

El teléfono 016 es el número de información y asesoramiento jurídico para las víctimas de violencia machista y su entorno. Funciona las 24 horas, es gratuito y no deja rastro en la factura telefónica aunque puede quedar registrado en ciertos terminales. Las personas con discapacidad auditiva o del habla pueden contactar por mensaje de texto en el número 900116016.

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