Un total de 12 de 15 acusados de pertenecer a un grupo criminal dedicado a cometer robos violentos, especialmente en zonas de playa de la capital almeriense, han reconocido los hechos por los que se encuentran acusados durante la sesión celebrada esta mañana en la Audiencia Provincial de Almería.

Otros tres acusados no han mostrado su conformidad, por lo que el próximo miércoles se llevarán a cabo una serie de pruebas testificales tras las que la Fiscalía elevará a definitivas sus conclusiones y, de forma previsible aplicará una sustancial rebaja en sus peticiones de pena para los otros 12.

Inicialmente, el Ministerio Público solicitaba penas de entre tres años y medio y 13 años de prisión para los acusados.

Según el fiscal, los acusados mantenían de forma permanente una organización para cometer "delitos graves" como robos con violencia o con fuerza, receptación, lesiones o falsedad documental y entre ellos presuntamente eran R.B. y A.B. los que dirigían y coordinaban las actividades delictivas que luego ejecutan el resto.

El fiscal recoge casos como el ocurrido el 26 de marzo de 2013 en el barrio de La Cañada de San Urbano, en Almería capital, cuando un hombre tuvo que entregar su vehículo (valorado en 24.770 euros) a dos jóvenes que lo amenazaron con un palo después de que uno de ellos le pidiese un cigarro en un ceda el paso.

En ese caso los autores no fueron identificados pero la calificación provisional de hechos, a la que ha tenido acceso Efe, incluye otros asaltos presuntamente perpetrados por los acusados, en los que obtuvieron vehículos, móviles y otros enseres utilizando para ello palos y aerosoles para cegar a las víctimas en zonas de playa o barrios próximos a éstas.

El fiscal considera que todos los acusados son autores de un delito de organización criminal, y había interesado seis años de prisión para R.B. y A.B. y tres años y medio de cárcel para el resto.

Además, acusa a R.B. y Y.E. por un delito de robo con violencia con instrumento peligroso, y a R.B. y A.B. por otro delito de robo con violencia con instrumento peligroso, por los que solicitaba tres años y medio de prisión para cada uno de ellos.

A A.B. y A.E. M. los acusa también por un delito de receptación, y reclamaba penas individuales de un año y nueve meses de prisión, y a K.A. por un delito de atentado con instrumento peligroso, por el que había interesado cuatro años y tres meses de prisión.