Almería

Reloj público y música sacra el el Fondón dieciochesco

  • Función utilitaria. La esbelta torre y la fuente de Carlos IV, orgullo y verdadero emblema de la localidad, manifiestan el auge de las instituciones eclesiástica y civil

SI la campana convoca a los fieles desde una torre alta y briosa, ésta es también el mejor emplazamiento para el reloj público. Así lo entendió el cabildo municipal de Fondón que, en su sesión del 15 de septiembre de 1763, acuerda pagar 3500 reales, a José Corona vecino de Granada y maestro de relojes y campanas del arzobispado, por el reloj que se colocará en la torre de la iglesia parroquial, por su utilidad, entre otras cosas, "para la mejor administración de las aguas". En el cabildo del concejo, justicia y regimiento de Fondón del 7 de febrero de 1764 se expone que "ha habido noticias de don José Corona, maestro que está fabricando el reloj de este lugar, que estará concluido y colocado en la torre de la Iglesia de este lugar en todo el presente mes; y haciéndose preciso el portearlo desde la ciudad de Granada a este lugar, hacer una puerta y ventana para el sitio donde se ha de colocar, y los materiales y maestras para la fábrica y cañón de bajar las pesas, en lo que regulan se podrá gastar a lo menos cien reales vellón" (Archivo Municipal de Fondón, Libro de Tercias 1759-64).

La esbelta torre y la fuente de Carlos IV, orgullo y verdadero emblema de la localidad, manifiestan el auge de las instituciones eclesiástica y civil, revelando, por otra parte, igual que el camarín de la iglesia de San Juan de Benecid, el optimismo y prosperidad del pueblo. Puesta de manifiesto, igualmente, en la aportación económica para adquirir el órgano, instalado en la tribuna de la iglesia parroquial de San Andrés.

El 11 de marzo de 1760 los alcaldes, regidores y el procurador síndico de Fondón ponen de manifiesto que el arrendatario de "la renta de los dos novenos de diezmo de mosto y uva de colgar... da en data mil y novecientos reales, que constan de una libranza que por dicho concejo se despachó, para la construcción del órgano que para esta Iglesia se ha fabricado" (Archivo Municipal de Fondón, Libro de Tercias 1759-64).

En su sesión del 8 de febrero de 1761 el concejo, justicia y regimiento de Fondón expone que el día anterior "celebraron cabildo, por el cual mandaron que, en este día, se tomasen votos de los vecinos de esta población en cabildo abierto, para en él deliberar la renta que convenga situar anualmente y perpetua al organista que toque el órgano, que nuevamente se ha hecho y colocado en la Iglesia Parroquial de esta población" (Archivo Municipal de Fondón, Libro de Tercias 1759-64). Se acordó una retribución anual, a cargo del concejo, de cuarenta y dos ducados para el organista, el cual tendrá "obligación, bajo de esta renta, a tocar las funciones, además de los días festivos y días de renovación del año... y con el cargo de que ha de tocar las funciones de este concejo, que son la fiesta de Desagravios, la de Nuestra Señora del Rosario, la de el Señor San Marcos, y las misas de Aguilando, y más si en adelante tuviese este concejo alguna otra fiesta de dotación" (Archivo Municipal de Fondón, Libro de Tercias 1759-64).

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