La junta de gobierno local del ayuntamiento de Roquetas de Mar, celebrada ayer por delegación del alcalde, decidía suspender la tramitación del procedimiento para la aprobación del proyecto de urbanización de Las Salinas; suspender la aprobación definitiva del proyecto de reparcelación hasta que los trabajos de estudio de las alegaciones se encuentren terminados y se formule la correspondiente propuesta, así como someter las alegaciones presentadas a informe técnico y jurídico, y en su caso, abrir un plazo de consulta individualizada con los titulares de los terrenos afectados por el proyecto.

En este sentido, el alcalde Gabriel Amat afirmaba que al terminar el plazo de alegaciones en información pública al proyecto de Las Salinas seguía manteniendo su línea de actuación y no iba a variar su discurso inicial, que ha sido el mismo ya que siempre ha argumentado que iba a negociar directamente con cada propietario afectado, razón por la que les había solicitado que presentaran las alegaciones oportunas en el ayuntamiento.

Amat insistió ayer en que "a nadie se le va a dar la espalda. El ayuntamiento tiene un dossier de finca por finca e irá llamando a todos los propietarios para tener la opinión de todos. Haremos lo que tengamos que hacer y lo que los ciudadanos quieran. Yo no voy a hacer nada que complique la vida a nadie. No voy a engañar a nadie. Antes de engañar me voy a mi casa. El que quiera creerme que me crea y el que no quiera creerme que no me crea. Yo voy a seguir haciendo lo mismo, intentar hacer lo mejor posible para todos. Quien haya dicho otra cosa es su problema y el tiempo pondrá a cada uno en su sitio", afirmaba en presencia de varios propietarios afectados, miembros de la Plataforma creada contra el proyecto del PP en Las Salinas, así como de concejales del PSOE y de Indapa o candidatos a la alcaldía en los próximos comicios locales por parte del PSOE, Juan Ortega, o de Izquierda Unida, Ricardo Fernández. Precisamente los socialistas denunciaban ayer que en la convocatoria del próximo Pleno, a celebrar el jueves 3 de marzo, no figuraba la moción que habían presentado solicitando la paralización del polémico proyecto. Hay que recordar que la Plataforma, que tiene previsto reunirse hoy con el delegado provincial de Obras Públicas de la Junta, decidió en su última concentración presentarse en todos los plenos municipales para expresar su protesta ante lo que califican como un atropello de sus derechos. El alcalde por su parte mantiene que nunca ha cambiado su discurso inicial, que ha sido abrir un proceso de negociación con cada uno de los propietarios afectados, exponer el proyecto en información pública para que se presentaran las alegaciones pertinentes y se conocieran exactamente todas las propiedades existentes y sus lindes, puesto que incluso había dueños que habían fallecido. Amat admitía ayer que "si algunas zonas se tienen que quedar fuera del proyecto también se quedarán, porque toda la gente que pidió que se quedaran viviendas fuera lograron finalmente que se quedaran fuera. También se podrá hacer una modificación si no quieren, porque no vamos a buscarle la ruina a nadie, no vamos a echar a nadie de su casa. Lo vengo diciendo siempre y no me habrán oído otra cosa. Se quedaron fuera en Las Salinas más de 200.000 metros que querían que fuera terreno urbanizable y no se pudieron incluir en el sector porque no había capacidad para las viviendas".